El Museo Nacional del Prado acaba de presentar el pasado 4 de marzo en La Habana una muestra al aire libre compuesta por reproducciones fotográficas a tamaño real de una cuidada selección de cincuenta y tres obras escogidas entre las más importantes y significativas de la colección del Museo como Las Meninas de Velázquez o El tres de mayo de 1808 en Madrid de Goya.
El proyecto denominado El Museo del Prado en La Habana está auspiciado por la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID) y la Consejería Cultural de la Embajada de España en La Habana, con la colaboración de la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana, tiene como objetivo impulsar el conocimiento, difusión y comunicación de las colecciones y de la identidad cultural del patrimonio histórico adscrito al Museo, favoreciendo el desarrollo y divulgación cultural de programas de educación.
Hasta el 4 de mayo, la exposición acercará al público caribeño 53 de las obras más relevantes de la colección del Prado, mediante reproducciones fotográficas a tamaño real, situadas en el Castillo de la Real Fuerza, un lugar de paso constante de público situado en la Plaza de Armas, en el centro histórico de La Habana, cuyo perímetro ha servido ya en otras ocasiones como mural privilegiado para contemplar diferentes exposiciones de arte.
Esta gran exposición al aire libre, comisariada por Ester de Frutos, jefa de Servicio de Actividades Educativas y Fernando Pérez Suescun, jefe de Contenidos Didácticos del Museo del Prado, va a permitir un recorrido cronológico por las diferentes escuelas de la colección permanente de la pinacoteca madrileña y conocer la historia de España, Europa y del arte occidental, de la mano de los grandes maestros de la pintura. Las escuelas española, flamenca, italiana, francesa, alemana y holandesa estarán presentes a través de sus protagonistas desde el siglo XII a los primeros años del XX.
La muestra, que cuenta con cartelas informativas de cada una de las obras y paneles que aportan datos sobre la historia del Museo y sus colecciones, está complementada por un extenso programa de actividades educativas y culturales, visitas guiadas y conferencias para público especializado y grupos escolares, además de un folleto explicativo.
Las reproducciones, impresas sobre paneles resistentes a las elevadas temperaturas y al alto grado de humedad propios del clima caribeño, se muestran a escala 1:1, por lo que, atendiendo a las particulares condiciones del recinto expositivo, de algunos cuadros de gran tamaño tan sólo puede ofrecerse un magnífico y grandioso detalle de la obra que se podrá ver completa en la cartela explicativa.
El Prado en las calles es un proyecto que inició su andadura en 2015, permitiendo que las obras del Museo del Prado ocuparan espacios públicos en las calles de Tegucigalpa, Ciudad de Guatemala y San Salvador, gracias a la coordinación de los Centros Culturales de España en cada una de esas capitales. Esa itinerancia continuará, y se incrementará, a lo largo de 2016, dado que además de La Habana, visitará Asunción, Lima y La Paz, saltando posteriormente a Manila y Guinea Ecuatorial, y completando además su gira por Centroamérica con Nicaragua, Costa Rica y Panamá.
Este proyecto, plantea una nueva posibilidad de acercamiento a las colecciones del Museo del Prado, que se verá enriquecida por la organización de una serie de actividades relacionadas en torno a la muestra, que el público cubano podrá completar también con la visita a www.museodelprado.es una website dotada de un complejo desarrollo tecnológico y de un diseño protagonizado por imágenes de las obras de arte en alta calidad, que proporciona al usuario la experiencia de disfrutar del museo en toda su extensión y profundizar en sus diferentes áreas de conocimiento.
La web incorpora también la posibilidad de crear y guardar itinerarios personalizados, así como obras favoritas y otros resultados de búsquedas gracias al desarrollo de un apartado socialmedia específico denominado “Mi Prado” que se adapta a la variedad de dispositivos existentes.
Su diseño define los ejes principales: la obra como entrada, la colección como vía principal de acceso a la navegación, la contextualización de la información aportada y la creación de una red social interna con funcionalidades esenciales para una mayor implicación e identificación del usuario con esta nueva experiencia digital del Prado.
Por otra parte, el número de seguidores de los canales del Museo en las redes sociales Twitter y Facebook confirman también el interés creciente de los usuarios de Internet, sobre todo los de habla hispana, por acercarse a las colecciones del Prado.
