Miles de niños se encuentran en un limbo en las zonas fronterizas de los Estados Unidos después de un largo y peligroso viaje para llegar al país, y deben enfrentar un futuro incierto y condiciones precarias en instalaciones ubicadas en Texas, Arizona, California y Oklahoma, informa PRNewswire.
Save the Children habló con varias madres que, en los últimos días, han cruzado la frontera. Aseguran haber contraído grandes deudas con los contrabandistas después de un extenuante viaje de semanas de duración desde países de Centroamérica. Incluso algunas madres mencionaron que no recibieron información adecuada sobre las leyes de inmigración antes de abandonar sus hogares.
Los niños en los centros de tránsito han estado durmiendo en espacios reducidos. Los padres aseguran que están deshidratados y que algunos están enfermos. Se han informado casos de sarna y pediculosis entre los niños debido al hacinamiento en estas instalaciones. El hostigamiento es una preocupación adicional, debido a que los niños en ocasiones están separados de los tutores y, por lo tanto, son más vulnerables.
«Estamos muy preocupadas por las noticias que hemos estado recibiendo en los últimos días de las madres que han tomado la decisión desesperada de recorrer miles de millas, a pesar de los riesgos», indicó Carolyn Miles, presidenta y directora ejecutiva de Save the Children. «Estos niños son susceptibles a daños adicionales, y estamos trabajando con rapidez para identificar sus necesidades y proporcionarles un espacio seguro donde reciban la atención y el apoyo adecuados para su edad».
Además de las familias que han emigrado, miles de menores de edad están colmando las instituciones de control transfronterizo, que no están adecuadamente preparadas para satisfacer las necesidades básicas de un número tan elevado de niños solos. Se prevé que estos números aumentarán en las próximas semanas y meses: según los cálculos del gobierno, más de 47,000 niños solos han cruzado la frontera, y se espera que más de 60,000 lo hagan este año.
Save the Children ha habilitado un espacio apropiado para niños en McAllen, Texas, para brindar programas de atención y apoyo psicosocial que se prevé ayudarán a 150 madres y niños todos los días.
Además, Save the Children trabaja en estrecha colaboración con las agencias gubernamentales, incluida la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (Federal Emergency Management Agency) y el Departamento de Salud y Servicios Humanos (Department of Health and Human Services) para respaldar sus iniciativas y garantizar que los niños reciban el apoyo, la atención y la protección que necesitan con urgencia.