Todos reproducimos vídeos de forma continua. Los vemos en la televisión, en el ordenador, en los teléfonos móviles, los creamos con diferentes tipos de cámara, etc. Cada uno de estos contenidos tiene asociado un determinado formato de vídeo. Aunque los fabricantes intentan que sus dispositivos reproduzcan la mayor cantidad de formatos posibles, no pueden abarcarlos todos.
Es posible que ese flamante reproductor de Divx que siempre te lo ha reproducido todo no se atreva con un WMV, o quizá si, pero antes haya que hacer una actualización.
Un video convertidor, como Movavi, es una herramienta que ha sido diseñada para conseguir la compatibilidad entre diferentes dispositivos.
Siguiendo el ejemplo anterior, lo único que tendríamos que hacer es cargar el WMV y convertirlo a un formato compatible con el dispositivo, como puede ser un AVI sencillo.
Esta herramienta también se puede utilizar para reducir el tamaño del vídeo: Si alguna vez has grabado con una cámara digital de alta definición, al pasar el vídeo al ordenador te habrás dado cuenta de que tiene un tamaño prohibitivo. Podemos usar un conversor, con un determinado códec, para reducir el “peso” de manera considerable.
¿Cómo funciona un convertidor de vídeo?
Hay diferentes tipos de convertidores. Los más sencillos son aquellos que nos permiten agregar el archivo a convertir, seleccionar el formato en cuestión, códec y pulsar el botón para empezar con el proceso.
También tenemos otras herramientas más avanzadas que nos permiten manipular valores como el bitrate, la relación de aspecto-ratio, mejorar la calidad de imagen y el sonido.
Hoy en día no hace falta decantarse por herramientas como la segunda y es que las más sencillas pueden hacer todo lo que queramos y más.
Antes de convertir un vídeo asegúrate de que…
- Se reproduce correctamente (puede que el problema no sea el dispositivo que no es compatible, sino que el archivo esté corrupto).
- El conversor debe ser compatible con el archivo que se desea convertir.
- El tiempo de conversión se incrementará dependiendo de la duración del archivo y de la calidad final del mismo.
Ten paciencia; una buena conversión puede tardar mucho más tiempo de lo que te piensas.
Este es el funcionamiento básico de un video convertidor.
