Se cumplen tres años de la muerte de Gloria Jiménez Villarroel, la lectora de noticias del informativo estelar de Televisión Nacional (TVN) durante el gobierno de Salvador Allende. Pero la televisora del Estado –y “de todos los chilenos”, según su slogan– ignoró la defunción y el rol de su antigua trabajadora, escribe Ernesto Carmona (Mapocho-Press).
Gloria fue uno de los primeros “rostros” femeninos de las noticias por televisión del Chile de los años setenta. En sus comienzos fue la Chica del Tiempo de la televisora del Estado, animadora de Femenino 70 y conductora de las noticias nocturnas estelares de la televisión pública.
Fue una luchadora valerosa contra la adversidad derivada del desempleo posterior al golpe, el exilio y demás consecuencias duras personales que le deparó la dictadura entronizada en 1973, como le ocurrió a centenares de miles de chilenos “co-dueños” del Canal 7, TVN.
En su carrera profesional, la imagen de su cara juvenil se identificó con las noticias de TVN en los años previos al golpe. Y se marchó de este mundo discretamente, sin pantalla, sin farándula y lejos de la “compasión pública” que suele acompañar el último viaje de los pioneros del mundo del rating de la TV chilena, y también de los olvidados artistas y creadores del espectáculo.
Gloria trabajó codo a codo, entre muchos, con Sergio Silva, otro inolvidable conductor de noticias de aquella época en que TVN fue dirigida por el Augusto Olivares, “El Perro”, amigo cercano de Allende, a quien acompañó hasta la muerte en el final doloroso, hace cuarenta años. También trabajó con Fredy Hube, Gabriel Muñoz y otras figuras de la primera década de la pantalla chica en blanco y negro.
Dejó a dos hijos, Diego Rojas Jiménez, productor de cine y TV, y Sebastián, artista plástico y pintor. Y también a Doris, su única hermana.
En memoria de la primera mujer conductora del informativo estelar de TVN, su hijo Diego preparó un video de tres minutos en que su bello rostro juvenil y su compromiso político como lectora del noticiario estelar traen a la memoria los estremecedores días previos al golpe de 1973, cuando el fascismo desestabilizaba de mil maneras el gobierno legítimo de Salvador Allende.
El periodista Eugenio Llona comentó que el mensaje del video “muestra, no cabe duda, que la vida nueva empieza a llenar las calles, las plazas, los resquicios imaginarios, con algo digno, donde miles limpian poco a poco el vidrio del olvido, y las cosas empiezan a renombrarse por su nombre”.
Para Llona, “Gloria tuvo un rol en TVN, y en la formación de opinión pública en este paisito, aunque a su memoria no se le ha hecho rescate, ni nada parecido a la gratitud. Probablemente ayuda a eso el quiebre brutal y traumático de época que tuvimos, pero también es parte de nuestra propia desidia y falta de respeto hacia nuestra memoria, la actitud defensiva y liviana que hemos asumido, sólo porque lo han decretado los desvergonzados e ignorantes mercaderes que controlan los mecanismos de generación de contenidos simbólicos en Chile”.
Cómo olvidar tu voz, tu bello rostro anguloso y tus ojos delineados, llenos de convicción. Me entero hace unos minutos, que ya no estás más en esta tierra, hace ya, 23 años. Esos tres años, de los que fuiste una activa participante, se quedaron en la memoria del tiempo para siempre. Ha sido tarde encontrarte y saber que ya te has ido.
Gloria Jiménez Villarroel, fuimos compañeros de estudio en el Pedagógico de la Universidad de Chile. Siempre nos gustaste, eras linda, culta, buena persona, sensible, inteligente. Yo escuchaba tus palabras, en directo y en los noticieros. La última vez que nos reunimos fue en la Contraloría. Yo, me fui a México y más tarde me dediqué a estudiar y difundir la música tradicional chilena.