Algún día se estudiarán en las facultades de Periodismo las despendoladas portadas del diario ABC correspondientes a los años de la involución democrática en España, más o menos coincidente con el periodo de las noticias falsas (me sigo negando a su terminología en inglés).
La portada de este 2 de marzo de 2019 del mencionado periódico es la que corresponde a un rotativo no sólo monárquico y conservador, entre cuyos méritos ha de contar el de su periodista Javier Bueno (no el del diario socialista Avance) al entrevistar al mismísimo Adolf Hitler en los años treinta, sino al que podría reivindicar a estas alturas del siglo XXI la mismísima monarquía teocrática con tal de enterrar la historia de republicanismo español, según se enterró y sigue indignamente enterrada la de quienes lo defendieron.
ABC se escandaliza por el gesto del timorato y efímero gobierno «socialista» que, después de ofender en la persona de su presidente la memoria de Manuel Azaña y Antonio Machado depositando sendas coronas de flores monárquicas en sus tumbas francesas, ha tenido la desfachatez de utilizar los colores de la enseña republicana para homenajear con un logo en la correspondencia de sus diplomáticos (de cara al exterior) la memoria del exilio republicano, del que se cumple en 2019 el octogésimo aniversario.
El diario ABC, en consonancia con su dilatada historia y entrañado acomodamiento a la corona, hubiese preferido, antes que semejante osadía, homenajear a cualquiera de nuestros pretéritos borbones, de tan gloriosa memoria.
