Con objeto de garantizar la plena participación en la sociedad de las personas con discapacidad y de reducir la fragmentación de la legislación que regula su acceso a productos y servicios, la Comisión Europea ha aprobado una propuesta de Directiva, que se conoce como Acta Europea de Accesibilidad. En ella se incluye una definición común para toda la Unión de los requisitos de accesibilidad de determinados productos y servicios en el mercado interior, así como su marco de aplicación.
Más de 70 millones de personas en la Unión Europea (UE) viven con una discapacidad, porcentaje que aumentará debido al previsible envejecimiento de la población de sus ciudadanos, que ya tienen más de 45 años. Gracias a la aprobación del Acta Europea de Accesibilidad, productos, bienes y servicios que se utilizan a diario, tales como teléfonos, cajeros automáticos, etc., serán accesibles para las personas mayores y con discapacidad, lo cual redundará en una mejor calidad de vida, necesaria para que vivan con la debida igualdad de oportunidades.
Como todos los ciudadanos miembros de la Unión, las personas con discapacidad tienen derecho a la accesibilidad, esto es, a vivir de forma independiente y participar plenamente en todos los ámbitos de la vida.
En su Carta de los Derechos Fundamentales la Unión considera que la accesibilidad de las personas con discapacidad es un derecho fundamental (artículos 21 y 26). En este ámbito de competencia compartida con los Estados miembros, la Unión ha ratificado la Convención de las Naciones Unidas sobre los derechos de las personas con discapacidad. Sin embargo, estas suelen enfrentarse a una serie de retos que dificultan sus actividades cotidianas. Para subsanar esta situación, la Comisión Europea aprobó una Estrategia Europea sobre Discapacidad 2010-2020, en la que incluía la accesibilidad entre sus prioridades. Desde entonces, la Comisión ha promovido la accesibilidad en su Agenda digital, haciendo especial hincapié en la prestación de asistencia a las personas con discapacidad o movilidad reducida en el transporte aéreo, e invirtiendo en el desarrollo de normas comunes de carácter voluntario sobre la accesibilidad en determinados ámbitos, así como las tecnologías de la información y la comunicación (TIC).
En lo que respecta a la accesibilidad a productos y servicios —la prevención y eliminación de obstáculos que plantean problemas para las personas con discapacidad a la hora de utilizar productos, servicios o infraestructuras— la oferta resulta insuficiente, además de existir una fragmentación de la normativa en el mercado de la Unión.
Fue en diciembre de 2015 cuando la comisión aprobó la propuesta para mejorar el funcionamiento del mercado interior de productos y servicios accesibles, ayudando a eliminar los obstáculos entre los Estados miembros. La Directiva propuesta persiguió dos objetivos principales: en primer lugar, armonizar los requisitos de accesibilidad para una lista de productos y servicios; dicha lista incluye ordenadores, teléfonos, televisores, servicios de comunicación audiovisual, transporte, servicios bancarios, libros electrónicos y comercio electrónico y en segundo lugar, la propuesta tenía por objeto utilizar los mismos requisitos de accesibilidad para definir claramente la obligación de accesibilidad, tal como se estableció en la normativa europea.
Finalmente, el 25 de abril de 2017, la Comisión de Mercado Interior y Protección del Consumidor (IMCO) del Parlamento Europeo aprobó un informe sobre la propuesta. Tras las negociaciones interinstitucionales (diálogo tripartito), el Parlamento y el Consejo alcanzaron un acuerdo provisional el 19 de diciembre de 2018, que fue aprobado por la Comisión IMCO el 22 de enero de 2019 , las microempresas quedarían exentas y, de manera más general, la Directiva debe evitar la imposición de cargas administrativas a los operadores económicos. También, en el acta aprobada se han incluido las llamadas de emergencia accesibles al 112, por lo que deben complementarse con la posibilidad de enviar mensaje de texto en tiempo real y videollamadas para personas con discapacidad visual.
