Para conmemorar el 75 aniversario de la liberación del campo de exterminio nazi de Auschwitz, Amnistía Internacional (AI) ha inaugurado un tapiz monumental que lleva el título de “El holocausto” en la Casa de la Unesco, en París.
Junto a los altos representantes de la agencia para la cultura de la ONU, han asistido a la ceremonia los miembros de AI France François Croquette, embajador para los Derechos Humanos y la Memoria de la Shoah y Bill Shipsey, fundador de Art for Amnesty.
El tapiz, de doce metros de largo –fruto de varios meses de trabajo por artesanos tejedores de los talleres franceses Pinton– permanecerá expuesto en París durante un mes, y después se trasladará a México, iniciando así un itinerario por los principales museos de la memoria y el arte del mundo.
El tapiz se ha realizado siguiendo «El Holocausto», fresco mural de Manuel Rodríguez Lozano, que “capta el dolor y la tragedia de las víctimas de violaciones de los derechos humanos y la guerra”. Una obra intemporal que refleja el mundo en que vivimos.
«Cuando se comete un genocidio se atenta contra el conjunto de los estados, contra toda la humanidad. Por consecuencia, todos los estados tienen la responsabilidad de prevenirlo, denunciarlo, hacer que cese y perseguirlo”, ha dicho en la ceremonia Sylvie Brigot, directora general de AI France. “Este es también el sentido de la misión de AI desde su fundación en 1961: luchar contra la impunidad para prevenir que no vuelva a producirse ningún genocidio más».