La Unión de Periodistas y Escritores Saharauis (UPES), con motivo del Día Mundial por la Libertad de Prensa, hizo un llamamiento para proteger a los periodistas en las ciudades saharauis controladas por Marruecos.
En el balance del año destacó el deterioro producido de los derechos humanos y el hostigamiento y violencia contra periodistas, blogueros y activistas saharauis. Del mismo modo recuerdan el bloqueo informativo, impidiendo la libertad de expresión y el cierre sistemático del territorio a la presencia de periodistas y observadores internacionales.
Periodistas y profesionales de los medios viven en las partes ocupadas del Sáhara Occidental «bajo la realidad del asedio, la prevención y los ataques de la ocupación marroquí en flagrante desafío a las normas del derecho internacional humanitario y el derecho internacional de los derechos humanos».
La ocupación marroquí «los ataca deliberadamente a través de todas las formas sistemáticas de atacarlos con todas las formas de represión directa e indirecta, en un intento de asediar e incluso impedir la verdad».
Durante doce meses UPES registró la detención de muchos periodistas para «someterlos a torturas y represalias por su labor como periodistas informando de la realidad y denunciando las prácticas, métodos y políticas sistemáticas de la ocupación marroquí».
UPES denunció que los periodistas eran «hostigados constantemente y confiscados sus equipos, como cámaras, teléfonos móviles y otros, para evitar que documentaran crímenes de tortura y represión contra civiles, activistas políticos y de derechos humanos en general, represión de manifestaciones, capturando escenas de violaciones, crímenes contra la humanidad y de guerra cometidos por la ocupación marroquí».
La UPES, así como el equipo de reporteros saharauis Equipe Media, en un comunicado, recordaron a los periodistas saharauis presos en cárceles marroquíes.
Entre los encarcelados, Mohamed Yahdih Jalienna ‘Al Sabi’ (director de Guerguerat Media, preso desde 2021, condenado a dos años de prisión); Khatri Faraji Dadda (preso desde 2019, condenado a veinte años de prisión), Mahmud Khambir (diez años de prisión), Abdalahi Lekhfuani (de Equipe Media, cadena perpetua), Hassan Dah (miembro de la Radio Nacional y TV saharaui, preso desde 2010, condenado a veinticinco años), Mohamed Lamin Haddi (periodista de la TV saharaui, preso desde 2010, condenado a veinticinco años) y El Bachir Khada (periodista de Equipe Media, condenado a veinte años).
De ellos, los cuatro últimos llevan más de trece años en prisión y cinco en aislamiento.
En Madrid, en un acto de la cadena Ser en colaboración con la sección española de Reporteros sin Fronteras (RSF), el periodista Nicolás Castellano recordó a los periodistas saharauis presos en la figura de Khatri Faraji Dadda, asi como a periodistas marroquíes presos como Omar Radi y Souleiman Raissouni.
Marruecos bajo nueve puestos en la clasificación de RSF de 2023, pasando del 135 al 144, siendo su situación «difícil» en una lista de 180 países y territorios analizados, mostrando que en el territorio marroquí, sin el Sahara, hay once periodistas y colaboradores de medios detenidos.