Interpelado el gobernador de Oaxaca, Gabino Cué Montegudo
Organizaciones de la prensa mexicana han emitido una alerta por las agresiones sufridas por periodistas y medios de comunicación en el Estado de Oaxaca, y han instado a las autoridades a velar por la seguridad de los periodistas y la libertad para ejercer su trabajo, informa Cerigua.
Mediante una carta enviada al gobernador de Oaxaca, Gabino Cué Montegudo, y al defensor de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca, Arturo Peimbert Calvo, las entidades de prensa manifiestan su inquietud sobre el ambiente negativo de la libertad de expresión y el periodismo que afronta el Estado, sobre todo en el Istmo de Tehuantepec, donde existe una puja por la construcción de un parque eólico.
Entre los casos señalados por el gremio de prensa se encuentran el del periodista Carlos Sánchez López, director de la emisora comunitaria “Radio Totopo”, quien enfrenta una orden de captura que, por las circunstancias políticas parece más bien una justificación política para acallarlo.
David Henestrosa Carrasco, colaborador de Radio TNT de Juchitán y director del informativo Generando Opinión, ha recibido amenazas de políticos de la entidad debido a su labor periodística y dijo tener una orden de aprehensión injustificada; asimismo, Filiberto Vicente, de Radio Xadani, recibió amenazas de muerte.
La pasada semana los periodistas Karina Martínez e Ignacio Garrido, de Radio Voces de los Pueblos, así como Rosa Rojas, enviada especial de la revista Proceso, fueron detenidos arbitrariamente por elementos policiales en San Mateo del Mar; Radio Totopo sufrió ataques y robo de su equipo el 26 y 29 de marzo pasado.
La periodista de Radio de Juchitán la Voz del Pueblo, María Elena Ramírez fue víctima el martes de la pasada semana amenazas de muerte por un dirigente ganadero; la comunicadora dudó en presentar la denuncia en la Procuraduría del Estado, debido a los antecedentes de inacción frente a estos delitos.
En junio del año pasado Said Hernández, de la revista Tucán, fue apuñalado y amenazado de muerte por parte de personas allegadas a sus agresores, y la semana pasada dos de sus agresores recobraron la libertad, pese a la apelación hecha por sus abogados y la delegación de la Procuraduría General de la Nación; ante esto se solicitó se redoblen las medidas cautelares hacía el periodista.
Ante estos hechos, y otros recopilados por los gremios de prensa, demandaron a las autoridades del Estado poner fin a este ambiente de hostilidad hacia la prensa y hacer cumplir la ley, para garantizar a los comunicadores y periodistas, la seguridad para ejercer su profesión y la protección de sus derechos fundamentales.
