El término ramadán, que alude al mes en el que el islam prescribe el ayuno obligatorio para los creyentes, se escribe con inicial minúscula por tratarse del nombre de uno de los doce meses del calendario musulmán, según indica Fundéu: «Según la tradición islámica, otras revelaciones tuvieron lugar en el mes de ramadán».
Asimismo, el nombre de ese mes se usa en español con el significado de ‘ayuno’ como en «El presidente del Yemen incumplió el ramadán al beber un vaso de agua en público». En este caso se escribe también con inicial minúscula.
Sin embargo, tal y como señala la Ortografía académica, cuando hace referencia concretamente al período religioso se escribe con inicial mayúscula, como, por ejemplo, «El Ramadán puede dejar cerca de 20 millones de euros en los comercios locales».
También las palabras islam e islamismo se escriben en minúscula, al igual que los sustantivos que designan a las distintas religiones o al conjunto de los fieles que las profesan.
Por otra parte, conviene recordar que islámico significa aquello que está relacionado con el islam (cultura islámica, arquitectura islámica…), y no es lo mismo que islamista, que hace referencia a quienes propugnan la aplicación de la ley islámica en la vida política.