Un buen puñado de organizaciones de derechos humanos* mexicanas están muy preocupadas por la terna de candidatos a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) enviada al Senado por el Presidente de la República, y en particular por la postulación de Eduardo Medina Mora.
Frente a la grave crisis en materia de DDHH que atraviesa el país, lo que se necesita es la consolidación de los órganos que garanticen la vigencia del Estado democrático de derecho y de los derechos humanos. En ese sentido, es vital que la SCJN esté integrada solamente por los profesionales más capaces, íntegros e idóneos, de tal manera que funcione como un contrapeso real, y que garantice el acceso a la justicia a los grupos más desfavorecidos.
Sin embargo, llama la atención, en primer lugar, que la terna actual esté compuesta por tres hombres, puesto que ya existe una clara mayoría de hombres en la composición de la SCJN. Además, el Gobierno mexicano se ha comprometido a nivel nacional e internacional, y en reiteradas ocasiones, a garantizar una presencia equitativa entre hombres y mujeres en los poderes judiciales, asegurando el ingreso y ascenso de las mujeres en la carrera judicial.
Por otra parte, a decir de las organizaciones civiles, la independencia, autonomía y capacidad de análisis crítico de la SCJN se verían maximizadas si su composición incluyera perfiles no exclusivamente de carrera judicial.
Curiosamente, el único de los tres candidatos que no es integrante del Poder Judicial es Eduardo Medina Mora, quien cuenta con una trayectoria política que impide que sea un ministro independiente. Además, está implicado en diversos casos de graves violaciones a derechos humanos.
Recordando que en próximas fechas están previstos otros dos nombramientos en el mismo organismo, a las organizaciones de derechos humanos les preocupa que la lógica detrás de la terna actual deje ver la intencionalidad no de consolidar la independencia de la SCJN, sino de avanzar intereses del poder ejecutivo dentro de ese órgano, que debería ser garante de la Constitución.
Trayectoria de Medina
El rechazo a la candidatura de Eduardo Medina data de hace muchos años. Fue el responsable de que se cometieran graves violaciones de derechos durante su gestión como secretario de Seguridad Pública en el sexenio de Vicente Fox (2000 a 2006). Uno de los casos más emblemáticos fue el de Texcoco y Atenco (Estado de México), en donde más de 2500 efectivos de la policía estatal y la entonces Federal Preventiva, atacaron a los pobladores los días 3 y 4 de mayo de 2006, dejando un saldo de dos jóvenes asesinados y 207 personas detenidas, entre ellas 47 mujeres. Precisamente 26 de estas últimas denunciaron haber sido torturadas y violadas sexualmente por policías.
Además de Atenco, la gestión de Medina al frente de la Policía Federal se destacó por otras violaciones cometidas por elementos de la Secretaría de Seguridad Pública a su mando, como las ocurridas en Oaxaca en noviembre de 2006, en el marco de los operativos contra la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca.
En diciembre de 2006 Medina Mora fue nombrado Procurador General de la República, y durante su gestión, la PGR declinó su competencia para investigar los hechos de Atenco a pesar de la participación de policías federales. Las violaciones a derechos humanos cometidas en Atenco están siendo analizadas en la actualidad por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.
También utilizó sus atribuciones para intentar obstaculizar el ejercicio de los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres, al presentar una acción de inconstitucionalidad en contra de las reformas que despenalizaron el aborto en el Distrito Federal.
Por otro lado, está ligado a la aprobación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) en los temas de agricultura, normas, prácticas desleales de comercio, inversión y reglas de origen. Durante el sexenio de Carlos Salinas (1988-1994), fue asesor del equipo negociador. Es decir, fue partícipe en la estructuración de ese instrumento internacional que ha sido sistemáticamente denunciado por organizaciones campesinas, por generar condiciones de pobreza e inequidad en el campo mexicano. En la actualidad, se encuentran en litigio ante los Tribunales Federales múltiples casos que confrontan la visión privatizadora del campo respaldada por el TLCAN.
Resulta difícil que un personaje que ha impulsado la privatización del campo en beneficio de grandes empresas, pueda mantener un criterio de imparcialidad y objetividad como ministro en este tipo de asuntos.
Medina no cumple
Finalmente existe un requisito de forma que tampoco cumple Medina Mora, pues el artículo 95, fracción V, de la Constitución Federal establece que uno de los requerimientos para poder ser Ministro de la Corte es haber vivido los últimos dos años en el país, situación que incumple, al residir en el extranjero desde noviembre de 2009, fecha en la que fue nombrado embajador de México en el Reino Unido y posteriormente en Estados Unidos.
Para las organizaciones civiles mexicanas, la presencia de Medina Mora en la terna de candidatos a ocupar la plaza de Ministro de la SCJN evidencia un profundo desprecio a los derechos humanos por parte de la Presidencia de la República, quien parecería querer impulsar un perfil policiaco y protector de los intereses corporativos dentro del Máximo Tribunal, a fin de que le garantice llevar a cabo, con la menor resistencia posible, un proyecto de nación que es incompatible con los derechos humanos.
De acuerdo con registros de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), fue la gestión de Medina Mora al frente de la PGR la que más recomendaciones recibió, en comparación con sus antecesores. Medina dejó la PGR en medio del caos desatado por la llamada guerra contra la delincuencia impulsada en el sexenio de Felipe Calderón.
Se han manifestado en contra de esta candidatura:
- Asistencia Legal por los Derechos Humanos (Asilegal)
- Asociadas por lo Justo (JASS – Just Associates)
- Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio y Justicia, Género y Derechos Humanos
- Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas
- Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan
- Centro de Derechos Humanos Fray Francisco de Vitoria
- Centro de Derechos Humanos de las Mujeres (Cedehm)
- Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Prodh
- Centro de Justicia para la Paz y el Desarrollo, AC (Cepad)
- Centro Diocesano para los Derechos Humanos Fray Juan de Larios AC
- Centro Regional de Derechos Humanos “Bartolomé Carrasco”, A. C. (Barcadh)
- Casa del Migrante de Saltillo (Frontera con Justicia AC)
- Consorcio para el Diálogo Parlamentario y la Equidad Oaxaca
- Documenta Análisis y Acción para la Justicia Social .A.C
- Fundación para la Justicia y el Estado de Democrático de Derecho
- Fundar Centro de Análisis e Investigación
- Indignación, Promoción y Defensa de los Derechos Humanos
- Instituto Mexicano de Derechos Humanos y Democracia A.C.
- Propuesta Cívica A.C.
- Red Nacional de Organismos Civiles de Derechos Humanos “Todos los Derechos para Todas y Todos” (conformada por 73 organizaciones en 21 estados de la República mexicana)
- Red Mesa de Mujeres de Ciudad Juárez
Ya es hora que el Presidente Peña Nieto de un giro de timón en su administración, toda vez, que la reciente propuesta (terna) a la Suprema Corte de Justicia de la Nación, solo incrementa la crisis de credibilidad imperante.