Es verdad que la Escuela Napolitana del siglo 19 de Italia no es conocida en Estados Unidos, por eso, esta exhibición llevada a cabo en el Instituto Italiano de Cultura de Nueva York pone de manifiesto la presencia de Napoles, su tradición, arte e historia, en coincidencia con los festejos de “Colombo Day” (Día de Colón) y el descubrimiento de América.
Marco Bertoli, marchand y curador de la muestra, me explica la importancia de esta escuela y la influencia de la pintura española durante el reinado de Carlos V, en Napoles.
Napoles, fue siempre un punto de atracción de artistas y escritores. Johann Wolfgang von Goethe, celebra ese encuentro en su libro “Viaje a Italia” (1816-1817) y también influye en la Escuela de Napoles del siglo 19. La luz del Mediterráneo, el claro-oscuro, la naturaleza, el estilo de vida, surgen en las pinceladas de estos artistas: Raffael Ragione, Giuseppe Laezza, Francesco Lojacono, Filippo Palizzi, representantes de ese mundo Napolitano, que ahora puede apreciarse en las bellas salas del Instituto Cultural de Italia en Nueva York.
En Nueva York uno puede ver el mundo, porque Nueva York es un mundo y pasa por esta ciudad, el pulso del acontecer mundial, en un minuto.
Consulado Argentino en NYA pocas cuadras está el Centro Cultural Argentino, centro de la cultura sudamericana, dirigido con eficiencia por el cónsul cultural Eduardo Almirantearena. Se exponen dos pintores argentinos muy distintos, que demuestran la diversidad artística de Argentina. Felipe Giménez, nació en Mar del Plata, un gran balneario del sur y pinta – como él dice- gente y circunstancias. Titula su muestra “Sucesos Argentinos”, así se llamaba un antiguo noticiero fílmico. Yo creo que son solo “Algunos Sucesos Argentinos», no exentos de gracia, aspectos lúdicos y reflexión.
En cambio, Nora Cherñajovsky, formada en Arquitectura, en esta muestra “Casa IX”, indaga un tema caro a la idiosincracia argentina: la retrovisión histórica, tanto individual como colectiva. A través de sus diversas “casas”, bucea en el inconsciente rescatando del olvido trazos, huellas, fragmentos, imágenes perdidas. Un presente visto desde la memoria, la nostalgia…
Sofia VariPasado, futuro, los artistas captan instancias lejanas, superando el tiempo y las geografías. Es el caso de Sophia Vari, (la conocí, años atrás en NY, junto al pintor colombiano Botero), expone en la prestigiosa Galeria Nohra Haime de Nueva York. En sus “Alto-Relieves”, en epoxy (reminiscencias del mármol), Sophia nos retrotrae a la antiguedad clásica, a Grecia, a sus frisos y esculturas, pero como es una mujer contemporánea, su lectura del pasado está impregnada de otras visiones: las guardas prehispánicas, las decoraciones del Art Nouveau, las formas geométricas de la Bauhaus…se acumulan en la memoria rasgos artísticos que fluctúan y se solidifican en estas obras rigurosas y bellas.
La memoria de los hispanos aparece en la exposición de “America Society”, dedicada a retratos de fotógrafos en colaboración con el Smithsonian Latino Center, imágenes de latinos en su devenir histórico.
Acaso el pasado no ilumina el presente? Sin embargo, actualmente hay pueblos que destruyen su pasado o lo desprecian o lo vandalizan… sucede esto en Medio Oriente, cuna de tantas civilizaciones…
Neferu
Todos estos interrogantes surgieron en mi al ver la imponente exposición “Antiguo Egipto Transformado: El Imperio Medio”. Nos trasladamos a las salas del Museo Metropolitano, viajamos en el tiempo al período de las Dinastías 11 al 13 del lejano Egipto, alrededor del 2030-1650 antes de Cristo.
230 objetos, esculturas, murales, bustos, orfebrería, cerámicas, nos revelan la sensibilidad y el grado de desarrollo de aquella monumental civilización egipcia que nació a la vera del rio Nilo. Ese Nilo que recorrí en una “Feluca” a vela, dirigida por el viejo guía nubio envuelto en su túnica blanca; nos entendíamos con señas y miradas y dormíamos bajo la luz de las estrellas.
Egipto en ese período de su historia vive una de las mas importantes reunificaciones del imperio, fue en esa circunstancia que se construyeron las grandes pirámides, el imperio redefine su cultura y sus tradiciones y las perpetúa en obras únicas. Obras seleccionadas de la colección del MET y de 37 museos Americanos. Un modelo de curaduría, investigación y coordinación museológica. Quiero recordar que el MET fue auspiciante de varias excavaciones a sitios arqueológicos, incluyendo Deir-el-Bahri.
El MET es una fuente innagotable de tesoros. De Egipto al Kongo, de una cultura grandiosa a una cultura misteriosa e instintiva: el Kongo.
“Kongo: Poder y Majestuosidad”, se titula esta exhibición que capta la civilización de la zona oeste de África, durante el siglo 15 al 20, a través de 146 piezas de colecciones privadas de Europa y Estados Unidos, donde se expresa la esencia negra.
Tuve el privilegio de conocer a Leopold Senghor, presidente en ese entonces de Senegal, en una reunión para intelectuales y artistas que se celebró en México. Fue maravillosa su actitud con nosotros y su improvisada disertación donde oimos de su boca, su concepto filosófico de la “Negritud”, la idea de identidad de raza, el simbolismo corporal, la expresión gestual, la relación con la naturaleza, los aspectos religiosos, el colonialismo africano y la visión desde Europa. Senghor, fue una experiencia iluminadora para mi, que reaparece, vivida, en estas esculturas en madera, en estos totem de la cultura Kongo, en este muestreo de una cultura que merece este análisis y mayor cuidado de parte de los propios africanos.
Mi recorrido termina en el MOMA, donde están inaugurando la gran exposición del maestro y fundador de la Escuela Constructivista, Joaquín Torres García, de la cual escribiré más adelante.
Walid-RaadUniendo el pasado y el presente quise detenerme en los trabajos del artista contemporáneo Walid Raad, nacido en el Libano, con estudios de fotografía en Estados Unidos y perteneciente a la generación del artistas libaneses de concientización histórica. En sus obras, la mayoria fotografías se revela la violencia actual de su tierra natal y los recuerdos de un pasado diferente. Esta muestra de 41 obras, vuelve a presentarnos el esfuerzo de la memoria por rescatar el pasado progresista y el presente destructivo, en aquellas tierras de Medio Oriente, desvastadas por los conflictos políticos y bélicos.
Belleza y destrucción, antiguas civilizaciones y reacciones actuales sobre lo histórico y sobre nuestro presente caótico.
Qué aldea global vivimos? Qué aldea global estamos construyendo? La voz de los artistas y del arte se alza como una luz ante la tiniebla y la incomprensión.
