El aceite Madriles, hecho con aceitunas de olivos procedentes del centro de la ciudad de Madrid, se ha presentado a la prensa mediante una cata celebrada el 8 de mayo de 2017 en la Cantina de Matadero Madrid.
Allí, César Pérez, creativo y principal impulsor del estudio TruthBehind 404 , explicó las cualidades de este aceite de oliva, el primero nacido en espacios urbanos tan insospechados, como pueden ser las rotondas: “se trata del primer aceite virgen extra de primera prensada en frío, el primer aceite de máxima calidad hecho con las aceitunas de los olivos del corazón de Madrid, olivos de rotondas e incorporaciones a la M30, olivos de jardines con piscina en comunidades de vecinos, olivos que decoran delegaciones de Hacienda y olivos del olivar de Castillejo, árboles olvidados en el centro de la ciudad. Un aceite urbano obtenido exclusivamente con métodos mecánicos: puro zumo de oliva recogida en su punto óptimo de maduración”.
El que piense que un fruto nacido en medio de la contaminación extrema de una rotonda ha de ser por fuerza venenoso, quedará convencido de lo contrario: “Nada de esa contaminación llega a la aceituna”, afirma el experto. Y en cuanto al sabor, exquisito.
En Madrid, la mayor parte de los olivos son de la variedad cornicabra y castellana y sus olivas alcanzan su punto de maduración entre noviembre y diciembre. «Hemos hecho una recogida temprana de la oliva, sigue César Pérez, para preservar las características alimentarias óptimas y potenciar los aromas frutados (una práctica nada habitual en la producción industrial de aceite donde se prefiere esperar a finales de diciembre para que la oliva tenga más peso a costa de perder gran parte de sus propiedades organolépticas). Además, la molturación se ha efectuado 24 horas después de la recogida, lo que garantiza la máxima calidad. Madriles es un producto de kilómetro cero. La moltura de nuestro aceite se ha realizado en la almazara del Instituto de la Vid, un centro de formación profesional situado en la Casa de Campo».
Alimentos urbanos
El aceite Madriles propone reflexionar y romper estereotipos sobre el origen de los alimentos y su calidad y llama la atención sobre los recursos disponibles, buscando una nueva perspectiva de la ciudad. Con el lanzamiento de este producto, el estudio TruthBehind 404 vuelve a hackear el espacio urbano en aras de una apropiación ciudadana del territorio. Sus proyectos tratan de promover una cultura de participación en todos los aspectos de una ciudad concebida por y para sus habitantes. Así, desde 2012, TruthBehind 404 ha realizado documentales, instalaciones y acciones que invitan a mirar Madrid con una mirada nueva. Algunos de estos proyectos se han desarrollado desde Medialab-Prado y La Casa Encendida, y se han dado charlas en eventos como TEDxMadrid.
En Hautôvia (un estado soberano independiente fundado por el estudio en la M40) ponían límite a la penetración del mercado en el espacio público. En Make a Sity proponían que todas las personas pudieran intervenir en lo que llaman el ‘hardware urbano’ con mobiliario diseñado en 3D. Ahora, Madriles sitúa ante la posibilidad de convertir la decoración urbana en alimento, cambiando la visión meramente decorativa de los olivos.
Hay que decir que la producción de este año ha sido de tan sólo treinta botellas de medio litro, por lo que aún no está a la venta.