Al cabo de diez días de festival y a razón de dos a tres películas por día, llegamos ya en la noche del viernes al final del trayecto en la competición oficial. En total 19 películas que aspiran a la Palma de Oro y diecinueve directores que esperan figurar de una forma u otra en el Palmarés.
Difícil saber cuál será la decisión final del jurado internacional que preside Pedro Almodóvar, en cuyo seno ha habido según se ha filtrado posiciones muy opuestas. Mas que hacer suposiciones sobre sus deliberaciones, prefiero avanzar aquí la quiniela de mis propios gustos y deseos.
La Palma de oro de esta 70 edición yo se la daría a la película rusa “Sin amor” de Andrey Zvyagintsev, poderosa en sus imágenes, emocionante y completa en su guion, realización e interpretación.
El premio al mejor director, o de la puesta en escena, se confunde en mi opinión con el de la Palma de Oro, pero si hay que optar por uno diferente, como lo dice el reglamento del festival, yo optaría por Robin Campillo con “120 latidos por minuto”.
En cuanto al premio de mejor guion original mi voto va por otra de las mejores y más novedosas películas de esta selección: “The Square” del sueco Ruben Ostlund, una buena sátira de nuestra sociedad occidental con un sano mensaje de tolerancia y generosidad.
El premio al mejor actor podría ser para el actor franco argentino Nahuel Pérez Biscayart por su interpretación en “120 latidos por minuto” del francés Robin Campillo, que figura también entre lo mejor de esta selección.
El premio a la mejor actriz, se lo daría a la alemana Diane Kruger, por ese papel de madre y esposa destruida interiormente por la brutal desaparición de su marido y su hijo en un atentado neonazi. Un thriller político del director germano turco Fatih Akin.
Como habrá también un premio del jurado, que nunca he sabido muy bien lo que significa o para que sirve, salvo a ser un premio de consolación, yo votaría por el “Rodin” de Jacques Doillon, para llevar la contraria los que han querido descalificarla de forma injusta.
Pero no se extrañe el lector si en el Palmarés ve aparecer películas como la producción de Netflix “Okja” de Bong Joon Ho, “Las presas” de Sofia Coppola , o “Hacia la luz” de Naomi Kawase, que también han tenido sus defensores en Cannes. En todo caso una cosa es clara en esta 70 edición, ninguna de las 19 aspirantes ha recibido el apoyo unánime del conjunto de la crítica internacional.
He visto también, cuando el tiempo me lo ha permitido, algunas, pero contadas películas de las otras secciones, Semana de la crítica, Quincena de realizadores o Un certain Regard. Lo que he preferido en el cine latinoamericano es “Los perros” de Marcela Said, y “La novia del desierto” de las argentinas Cecilia Atán y Valeria Pivato, y también la brasileña “Gabriel y la montaña” de Felipe Barbosa, rodada en el continente africano, que se ha llevado por cierto dos de los premios en la Semana de la crítica.
Señalemos que el gran premio entre las siete películas de la Semana de la crítica ha sido para “Makala” de Emmanuel Gras, un documental que relata la larga marcha hacia Kinshasa de un joven procedente de la Republica democrática del Congo. Premiado ha sido también el cortometraje “Los desheredados” de la catalana Laura Ferrés.
