“He llegado a ver tan claro que entre lo conseguido y lo fallado apenas hay diferencia. Inclinado a las preguntas más que a las respuestas”. Esta frase de Eduardo Chillida resume el sentir y el hacer de su última etapa, cuando la depuración de las formas y la eliminación de lo superfluo pueden considerarse una constante en sus obras. Precisamente son piezas de esta época las que se podrán disfrutar en la bodega CVNE, en Haro, La Rioja, desde el pasado 9 de abril y hasta el 30 de septiembre bajo el título “El viento que no vemos”.
Se trata de una exposición creada expresamente para esta nave de la bodega por Ignacio Chillida, comisario de la misma; piezas especialmente escogidas para ser expuestas en un espacio igualmente singular, fuertemente vinculado a la tierra y donde confluyen tradición y modernidad.
La exposición estará formada por un total de ocho esculturas, cinco de ellas de gran tamaño y otras tres más pequeñas, todas ellas realizadas en hierro, alabastro, arenisca y tierra.
La nave donde se ubica la exposición es abierta y diáfana lo que potenciará el diálogo entre las esculturas y el espacio circundante. Además, estarán situadas de manera que el visitante pueda interactuar con ellas, rodearlas y experimentarlas. En definitiva, se trata de una exposición para ser vivida.
Las obras
Las esculturas seleccionadas introducen a un Chillida pausado. El mismo que en su juventud hacía vibrar los hierros con rebeldía, se muestra en estas obras más sosegado, pero también más seguro y sólido.
Una de las esculturas más singulares de esta exposición es la piedra de forma cruciforme, encastrada en la pared al fondo de la nave. Expuesta por primera vez al público, esta arenisca fue labrada por las manos del artista en el molino de Los Vados en Burgos, donde originalmente se encontraba incrustada en sus muros.
Otras esculturas presentes en la exposición son “Escuchando la piedra III” o “Lo profundo es el aire XVIII y XIX”. En estas, Chillida horada los bloques macizos hacia el interior, ideando laberintos, y accede a las entrañas de la materia hasta tocar su esencia.
Además, se podrán disfrutar de “Homenaje a Cioran”, “Homenaje a la arquitectura II”, realizada en alabastro, “Lurra 94” y “Zuhaitz VI”.
Arquitectura, escultura y vino
Tal y como Chillida hizo en sus obras, CVNE saca al exterior la esencia de cada vino. La eliminación de lo superfluo permite la creación de caldos de gran calidad. En CVNE comprenden que es una suma de factores lo que da como resultado grandes vinos. No solo influyen la tierra o la uva, sino que para hacer un gran vino es necesario mimarlo y entenderlo. Esto ha dado como resultado una manera de hacer vino en la que confluyen historia, tradición y modernidad y que acumula ya 135 años de experiencia.
Cabe destacar que la arquitectura ha sido uno de los pilares fundamentales a lo largo de la historia de CVNE. El vino necesita un hogar en el que crecer, en el que madurar y en el que descansar y en CVNE han conseguido crear este espacio en el que a la vez se respira diseño y vanguardia.
El vino surge de la tierra, como también la obra de Chillida lo hace de la piedra o el hierro. Una vez más, encontramos puntos de encuentro entre Chillida y la obra de la bodega. La naturaleza, lo que para el artista supone un imán, una inspiración, para la bodega es el inicio, la fuente de su vida y existencia.
Tanto CVNE como el artista vasco más universal han sabido desde siempre conjugar tradición con modernidad y han marcado un antes y un después en respectivas épocas, aplicando la vanguardia a su trabajo y estableciendo así un factor diferencial que ha marcado un hito en sus respectivos ámbitos.
Las visitas
Habrá dos modalidades de visita para conocer la exposición de la bodega CVNE, ubicada en el Barrio de la Estación de Haro:
- Visita a la bodega y la exposición: tendrá un coste de 10 euros, e incluye una copa de vino al finalizar la visita y una copa de cristal, como obsequio. Para realizar esta visita, será necesario realizar reserva previamente a través del mail [email protected] o del teléfono 941 304 809. Los horarios de las visitas serán los siguientes: de lunes a sábado a las 10.00, 11.30, 13.00 y 16.00, y los domingos a las 10.30 y 12.30 horas, y durante los meses de julio y agosto a las 10.00, 11.30, 13.00 y 14.30 horas.
- Visita a la exposición: la entrada será de 8 euros e incluirá también la degustación de una copa de vino y una copa de cristal, como obsequio. Los horarios de visita son ininterrumpidos de 10.00 a 18.30 horas de lunes a sábado y los domingos de 10.30 a 14.00 horas. Durante los meses de julio y agosto, el horario es ininterrumpido de 9.30 a 16.00 horas.
Acerca de Eduardo Chillida
Eduardo Chillida es un artista natural de Donostia (10 de enero de 1924-19 de agosto de 2002), que ha pasado a la historia por su trabajo en la escultura y su dominio de los materiales y el espacio. Su obra está presente en los grandes museos y colecciones de todo el mundo, y sus esculturas se encuentran frente al mar como en San Sebastián y en ciudades como Washington, París, Lund, Munster, Madrid, Helsinki, Basilea, Palma de Mallorca, Guernica o Berlín. Sobre su obra han escrito arquitectos, matemáticos, filósofos como Martín Heideggeer y Emile Cioran, o poetas como Octavio Paz.
Acerca de CVNE
La Compañía Vinícola del Norte de España (CVNE) se fundó en 1879 en la localidad riojana de Haro, en la zona denominada Rioja Alta dentro de la clasificación de Denominación de Origen Calificada Rioja (D.O.C. de Rioja), y hoy, cinco generaciones después, continúa en manos de los descendientes de los fundadores de la bodega.
La Compañía conjuga permanentemente la vigencia de las sabias tradiciones bodegueras con la introducción de las últimas innovaciones, que hacen que los caldos de esta bodega sean reconocidos ayer, hoy y mañana como vinos de gran calidad.