Muchos de los que leemos desde hace años algunos de esos medios, teníamos ganas de que alguien con la perspicacia y experiencia de Pascual Serrano -excelente analista de la comunicación- escribiera el oportuno y necesario libro que nos hablara de su historia, gestión, difusión y rumbo. Me estoy refiriendo a periódicos y agencias como Le Monde Diplomatique (Francia), La Jornada (México), Le Courrier (Suiza), Brecha (Urguay), Inter Press Service (IPS, Italia), Democracy Now! (Estados Unidos), Junge Welt (Alemania) y The Nation (Estados Unidos).
El autor ha partido de la misma base para hacerlo que nosotros para leerlos, visto que los grandes medios de comunicación son acríticos y se circunscriben al pensamiento dominante, según podemos comprobar en nuestro país, ha buscado Serrano aquellas cabeceras que son díscolas y que lo son, además, con una profesionalidad contrastada, de modo que sus contenidos tienen una difusión amplia, están asentados en el tiempo -en algunos casos durante muchos años- y reconocen y remuneran el trabajo de sus redactores, sin basarlo en el voluntarismo o la solidaridad, que tantas veces afectan a la calidad del producto infomativo/opinativo.
Todos los medios que figuran en el libro, sin ser grandes o poderosos como los convencionales, cuentan con cientos o miles de puntos de distribución, disponen de redes de apoyo que los difunden, poseen miles de suscriptores que los financian, circulan por numerosos canales de radio o televisión, son reproducidos por numerosos nodos de comunicación y, sobre todo, se inspiran en la ciudadanía para decidir sus contenidos, dar voz a los ámbitos populares, servirse del análisis de los intelectuales críticos y contar siempre con el apoyo de sus lectores y audiencias.
Gracias a Pascual Serrano podemos entrar tanto en el registro contable de sus administraciones -más o menos saneadas- como en las reuniones de sus consejos de redacción, a fin de poder comprobar la mantenencia de su viabilidad económica en un periodo en que tanto se habla de la crisis de la Prensa. Precisamente éste era el objetivo del libro, tal como afirma el autor: exponer de modo divulgativo la estrategia y los métodos de estas cabeceras no neoliberales ante el entorno económico adverso del mercado neoliberal.
Quizá se habría conformado Serrano, al proyectar su trabajo, con esa exclusiva referencia a medios radicados en distintos países de Europa y América si en el transcurso del mismo no hubieran surgido en España una serie de cabeceras que mantienen similares criterios empresariales y una línea progresista y crítica semejante a la de las mencionadas. Lo que Serrano llama el boom español se inició tras la disolución del diario Público en papel y el abortado proyecto de La Voz de la Calle, con la arrancada de ElDiario.es, La Marea, Alternativas Económicas, Mongolia, InfoLibre y Jot Down Magazine, medios todos que también revisa el autor y sobre cuya corta trayectoria da algunos resultados económicos, muy positivos en el caso del periódico que dirige Ignacio Escolar.
Una parte del éxito de las empresas periodísticas analizadas en este libro, según escribe su autor como reflexión final, se debe a que sus equipos han comprendido que deben explicar el mundo sin miedo al compromiso, a tomar partido. Entienden que los lectores y las audiencias quieren voces valientes que interpreten lo que sucede, siempre que se haga no desde la mera opinión o la militancia, sino desde el rigor periodístico.
Dar voz a los colectivos sociales ignorados por el mercado o enfrentarse con valor al poder, siempre requerirá unos medios dispuestos a hacerlo. No tendrán la hegemonía de otros, pero siempre servirán para recordarnos que otro periodismo es posible, tal como está ocurriendo con las cabeceras incluidas en el libro de Serrano. Periodismo a pesar de todo, según reza en su cabecera ElDiario.es, que a mi juicio, debería cuidarse de una demasiado invasiva carga de publicidad para quienes no lo leen como socios.