Una agrupación de BIPOC, acrónimo que significa «negro, indígena y persona de color» (black, indigenous y people of color), protagoniza este este sábado 4 de julio en Montreal una manifestación en moto contra el racismo.
Muchos canadienses creen que el racismo no es un problema en Canadá; el ejemplo más reciente es el del primer ministro François Legault, quien niega la existencia de racismo sistémico en Quebec. Sin embargo, «al negar su existencia, agravamos el problema», señala el organizador de la manifestación, Tony Alfonso.
«Como persona de color y motociclista, he visto y sentido los efectos del racismo, ya sea en una moto o en la vida, y me parece importante organizar esta manifestación en solidaridad para unir a las personas contra el racismo», dice Tony Alfonso.
Los negros, los pueblos indígenas y las personas de color se han enfrentado a la opresión sistémica a lo largo de la historia canadiense.
En 1876, Canadá aprobó la Ley de Indios que establecía el atroz sistema escolar residencial, que no fue abolido hasta 1996.
La segregación racial de los negros en Canadá ha sido respaldada históricamente por leyes, decisiones judiciales y normas sociales.
Un informe publicado por la ciudad de Montreal en 2019 muestra que la población aborigen representa el treinta por ciento de las víctimas de la brutalidad policial, mientras que solo representa el cinco por ciento de la población.
Los negros son cuatro veces más objetivo del Service de police de la Ville de Montréal (SPVM), y los aborígenes son seis veces más objetivo. El racismo sistémico sigue siendo un problema real dentro de la SPVM.
El racismo también existe en la comunidad de moteros.
Los primeros clubes de motociclistas no permitieron que los BIPOC fueran miembros. MotoGP nunca ha visto a una persona negra participar en una carrera. Las estrategias de publicidad y marketing de motocicletas omiten habitualmente a las personas negras, indígenas o de color, o las incluyen de manera puramente simbólica.
El objetivo de esta manifestación de motocicletas es afirmar que las personas negras, indígenas y de color sufren de racismo en Canadá y que la comunidad de motociclistas no se quedará a un lado de la carretera mientras esto sucede.
No aceptamos el mantra «Todas las vidas importan» porque ignora categóricamente la crisis actual y la opresión diaria de las personas negras, indígenas y de color. Estamos unidos contra el racismo, concluye Tony Alfonso.