La lluvia y la nieve caen, no precipitan., recuerda la Fundéu en su Recomendación del día.Tanto nevar como llover se refieren a fenómenos meteorológicos y pertenecen a una categoría de verbos tradicionalmente conocidos como impersonales.
El verbo precipitar no pertenece a esta categoría, pues con él siempre tiene que haber alguien o algo que sea la causa o el agente, y en consecuencia es inadecuado decir «Hoy precipitará en el norte de la región». La precipitación, como la nieve o la lluvia, tampoco es el agente, por lo que es igualmente inapropiado decir «La lluvia precipitará desde primera hora de la mañana».
En estos casos, lo adecuado es emplear los verbos llover o nevar, o recurrir a alguna construcción como habrá precipitaciones o la nieve caerá.
Los ejemplos anteriores pasarían a ser: «Hoy habrá precipitaciones en el norte de la región» (o mejor, «Hoy lloverá…», «Hoy nevará…», «Hoy nevará y lloverá…», según el caso) y «La lluvia caerá desde primera hora de la mañana».
Entre que lloverá o habrá precipitación me siendo enredado, así que mejor para sí mismo dire como el poeta simplón: «el cielo llorará».