El presidente Rafael Correa destacó la estabilidad que durante sus años de gobierno han tenido los altos mandos de las Fuerzas Armadas y de la Policía y que los recientes cambios en la institución militar se debieron a brotes de indisciplina, informa Andes.
El pasado 9 de diciembre de 2016 el presidente el presidente Correa hizo cambios en la cúpula militar removiendo al jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas y a los jefes de la Armada y de la Fuerza Aérea, sin embargo mantuvo al comandante del Ejército.
Rafael Correa señaló ese día que se han producido “brotes de indisciplina, cosas inaceptables (…) entonces yo necesito un liderazgo en cada rama para que los soldados y sobre todo los altos oficiales cumplan con su deber de disciplina, de lealtad, de no ser deliberantes y si quieren ser deliberantes pidan la baja y dedíquense a la política”.
El mandatario se refirió a los recientes casos del exoficial de la marina Edwin Ortega, quien escribió una carta en términos ofensivos al presidente y un almirante que hizo declaraciones en medios de comunicación sin contar con una autorización para hacerlo.
“Somos institucionalistas pero también nos hacemos respetar y entiendan que aquí hay un comandante en jefe”, enfatizó el mandatario al recordar que antes de su gobierno los mandos militares y policiales eran cambiados con frecuencia.
Evidenció, además, que oficiales que ahora pasaron al servicio pasivo se han dedicado a la política y se han aliado a candidatos de “extrema derecha” como el banquero Guillermo Lasso y la socialcristiana Cynthia Viteri.
“Si son miembros activos tienen que apegarse a la Constitución y no deliberantes pero como habían brotes de indisciplina he tenido que hacer cambios y lo seguiré haciendo en uso de mis atribuciones constitucionales”, sentenció.
