Reporteros sin Fronteras (RSF) reprueba la intimidación y las amenazas padecidas por la revista cooperativa La Garganta Poderosa el 16 de septiembre de 2013 en Villa Zabaleta, un barrio pobre de Buenos Aires.
Decenas de hombres armados de la Gendarmería Nacional (aduana militar) invadieron sus oficinas y requisaron el equipo de la redacción sin mostrar una orden judicial ni dar una explicación.
“Efectuado fuera de todo marco legal, este operativo represivo contra La Garganta Poderosa y su personal constituye un gravísimo abuso de poder. Una investigación federal debe determinar cuanto antes las razones de tal procedimiento y castigar a los autores. Por su parte, los altos mandos de la Gendarmería deberán rendir cuentas por el comportamiento de sus efectivos. ¿Por qué motivo la Gendarmería tendría la orden de acallar a una revista local?”, cuestiona RSF.
El barrio Villa Zabaleta aún se encuentra conmocionado por la muerte de un niño de nueve años, ocurrida el 7 de septiembre pasado tras violentos enfrentamientos entre bandas locales y entre éstas y las fuerzas del orden. Horas antes de que La Garganta Poderosa sufriera la agresión, periodistas de la revista habían acompañado a familiares del niño a presentar una denuncia ante los tribunales. La tarde de ese día aparecieron cinco camionetas de la Gendarmería en la zona.
“Vinieron como si estuvieran en medio de una guerra. No mostraron orden judicial ni autorización de ningún tipo. Tampoco se quisieron identificar. Cuando un compañero pidió que se identificaran, lo pusieron contra la pared, le doblaron el brazo y quisieron detenerlo, cosa que pudimos evitar en medio de forcejeos” señaló un redactor de La Garganta Poderosa a RSF.
Violencia local
En Argentina –país menos violento para los periodistas que otros de la región– se ha registrado en estos últimos meses un aumento de las agresiones, en especial en provincias. Daniel Ortigoza, periodista y propietario de la estación FM Imperio en la provincia de Misiones (noreste), denunció ante RSF la golpiza que sufrió a manos del intendente de Puerto Esperanza, Alfredo Gruber, el 13 de septiembre pasado, bajo la mirada y pasividad de los policías. El periodista, que tuvo que ser hospitalizado, había señalado la posible implicación del sobrino de Alfredo Gruber en el asesinato de una joven de 18 años ocurrido el año pasado.
Otro aspecto negativo, en Argentina se encuentra preso uno de los cuatro periodistas encarcelados en el continente: Néstor Omar Pasquini, quien el 12 de septiembre pasado inició su tercer año de prisión en la provincia de Córdoba (centro).
