Detenida en mayo de 208 y condenada en diciembre a seis años de cárcel «por diversas actividades prohibidas por la ley antiterrorista» en Arabia Saudí, Loujain al-Hathloul, de 31 años, defensora de los derechos de las mujeres y promotora de la campaña a favor de que puedan conducir, ha quedado en libertad este 10 de febrero de 2021, tras permanecer más de mil días en la cárcel.
«Loujain está en casa», ha escrito en Twitter Alia al-Hathloul, hermana de militante, junto a una fotografía que la muestra sonriente, inmediatamente después de abandonar la cárcel. Durante todo este tiempo, Loujain se ha negado a desmentir las acusaciones de tortura aplicada por sus carceleros y ha llevado a cabo varias huelgas de hambre en defensa de sus derechos.
Ese mismo miércoles se ha producido también la liberación de otra militante feminista saudí, la periodista y bloguera Nouf Abdulaziz, en arresto domiciliario en su casa de Ryad desde junio de 2019, cuando fue detenida después que ver censurados varios de sus artículos en los que tocaba temas sensibles, como su defensa de los derechos de las mujeres.
Tanto la Federación Internacional de los Derechos Humanos (FIDH) como el Gulf Center Human Rights asumieron la defensa pública de Abdulaziz.
Pese a encontrarse en libertad, tanto Loujain al-Hathloul como Nouf Abdulaziz siguen privadas de algunos derechos, como el de viajar libremente o hablar acerca de sus convicciones.
Algunos medios internacionales avanzan la hipótesis de que la libertad de ambas militantes sea una consecuencia de las nuevas medidas adoptadas por la recién nombrada administración Biden en Estados Unidos, y el anuncio de que en sus futuras relaciones con el reino saudí tendrá en cuenta la situación de los derechos humanos en el país del Golfo.