LA CULPA DEL GOLPE CONTRA ALLENDE ES DE ALLENDE
Lo que decía el diario ABC en la portada de su edición del 12 de septiembre de 1973:
«Contra el caos creciente, contra la vía al socialismo de allende que ha arruinado al pueblo chileno, contra la amenaza de una dictadura marxista, contra el desastre absoluto social, económico y político del país; en defensa de la paz, del orden, de la ley, de la libertad, de las conquistas sociales de los trabajadores, del diálogo y la convivencia normales se ha alzado el Ejército de Chile, columna vertebral de la nación y única posibilidad de salvación, hoy, para el entrañable país hermano, merecedor de mejor suerte. ojalá que los militares, una vez cumplida su misión quirúrgica de urgencia, devuelvan a chile el normal ejercicio de la democracia dentro de las líneas constitucionales de aquel Estado hispanomericano».
Lo que decía ayer el diario de Intereconomía La Gaceta de los Negocios, cuarenta años después del golpe de Estado del general felón, suscrito por uno de sus habituales colaboradores:
«Se cumplen 40 años del golpe de Estado contra Salvador Allende. La asonada militar tuvo éxito por la unión del Ejército, que no se dio en una intentona anterior. Un golpe de Estado es una operación compleja que requiere coordinar muchos elementos dispares. Por eso es frecuente que los golpes se ejecuten sobre el modelo de operaciones de movilización de efectivos y control de resortes del poder previamente concebidas por los estados mayores. Todos los estados mayores del mundo tienen planes preparados para situaciones de excepción o alarma; es parte de su trabajo. Estos planes tienen por objeto asegurar el orden en el país y evitar vacíos de poder. Su sujeto, por definición, es el poder legalmente constituido. La mecánica del golpe consiste en ponerlos al servicio de otro sujeto. Eso es lo que pasó en Chile. Un ejemplo de libro es el golpe de julio de 1944 contra Hitler, que se ejecutó sobre un molde, la “operación Valquiria”, inicialmente concebido para hacer frente a una emergencia nacional. Del mismo modo, el golpe de septiembre de 1973 en Chile se ejecutó sobre la previsión de un “plan de contrainsurgencia”, diseñado por los estados mayores para hacer frente a la eventualidad de que la agitación social desbordase a los Carabineros, la principal fuerza del orden del país. Este plan prescribía una división del territorio nacional en zonas cerradas y señalaba qué fuerzas militares debían hacerse cargo de cada zona, con descripción de sus cometidos concretos».
Yo creo que el claro ejemplo de libro, poniendo como comparanza el golpe de julio de 1944 contra el dictador Adolf Hitler, no lo hubiese compartido el dictador Augusto, uno de los pocos jefes de Estado que estuve presente en los funerales de su admirado colega el dictador Francisco Franco, al que Hitler ayudó a instaurar un régimen similar al de Pinochet durante casi cuarenta años, con el agravante en el caso de España de soportar antes el país una crudelísima guerra civil. Cabe pensar, por lo tanto, que si Pinochet admiraba a Franco, también le fuera simpático el Führer. A más abundamiento, cabe recordar que Villa Baviera, conocida también como Colonia Dignidad o Sociedad Benefactora y Educacional Dignidad, localidad fundada a principios de la década de los sesenta en el sur de Chile por Paul Schaefer, suboficial del Ejército nazi, fue centro de detención y tortura durante los primeros años de la dictadura pinochetista.
