El próximo Gobierno de España debe elaborar un Plan de Acogida para personas refugiadas que asegure su integración y que no acaben en la indigencia
En los meses de mayo y junio las autoridades españolas han permitido la llegada de 124 personas refugiadas procedentes de Grecia e Italia, de origen sirio, eritreo y afgano. Hasta la fecha, a través del sistema de reubicación solo habían llegado 18, pese a encontrarnos frente a la mayor crisis de refugiados desde la Segunda Guerra Mundial.
Amnistía Internacional, en el Día Mundial de las Personas Refugiadas, señala que España se aleja mucho todavía del compromiso de acoger a 17.337 personas hasta el año 2017 (1.449 por reasentamiento y 15.888 por reubicación), tal y como ha asegurado ante la Comisión Europea. Además, las pocas que han llegado han encontrado un sistema de asilo discriminatorio e ineficaz, que debe ser reformado.
Amnistía exige al nuevo gobierno que salga tras las elecciones del próximo 26 de junio que elabore un nuevo Plan de Acogida para las personas refugiadas en el que participen también las Comunidades Autónomas y las entidades locales. El Plan debe estar encaminado a asegurar la integración de las personas y que no acaben en la indigencia.
“En los debates televisivos, la mayoría de los representantes de los diferentes partidos políticos se han pronunciado a favor de que España cumpla con sus compromisos con las personas refugiadas. Pero ya es hora de que eso se haga realidad. Sus palabras no significan nada cuando la realidad es otra: los que huyen de la guerra y la persecución no han encontrado ni solidaridad ni un refugio adecuado en España”, ha asegurado Esteban Beltrán, director de Amnistía Internacional España.
“España debería denunciar al acuerdo de la UE-Turquía, que está causando el abandono de miles de personas en condiciones terribles en Grecia, la devolución de otras a través de la frontera turca con Siria, y el peligro de que puedan ser expulsadas a países donde corren graves riesgos”, agrega Esteban Beltrán.
Tal y como ha denunciado Amnistía Internacional en un reciente informe el sistema de asilo en España es poco acogedor, y puede llevar a las personas a la indigencia a medio plazo. Por eso la organización exige que se garantice una acogida adecuada y duradera en el tiempo a todas las personas desde el primer momento de la solicitud y mientras estén como solicitantes de asilo, adaptando el sistema de acogida a las necesidades y los perfiles de las personas solicitantes e integrando un enfoque de igualdad de género y diversidad
Pero además el Plan debe incluir otras medidas. Entre ellas, las dirigidas a reducir las listas de espera: al finalizar el año 2015 más de 16.400 personas seguían pendientes de que su resolución fuera resuelta. Además, es necesario garantizar la libre circulación de las personas refugiadas de Ceuta y Melilla a la Península y que las personas solicitantes más vulnerables como mujeres embarazadas y menores tengan acceso inmediato a una entrevista individualizada para la evaluación de sus necesidades.
