Bill y Melinda Gates quieren un nuevo preservativo que tenga las ventajas del actual, pero no sus inconvenientes
Según una información recogida en el digital francés Rue 89 de la página Techno-science.net, la Fundación Bill y Melinda Gates considera que para conseguir aumentar el uso del preservativo es necesario que se produzcan mejoras tecnológicas en un producto que tiene ya 400 años de existencia y cuya fiabilidad es cada día mayor.
Por eso, ofrece 100.000 dólares –que podrían aumentar hasta un millón, en función de las necesidades- a quien invente el preservativo del futuro, lo que significa que “aumente significativamente el placer, para aumentar su utilización de forma regular”, y también para quien invente “un preservativo femenino, que sea más práctico y menos caro”.
Desde enero de 2000, el matrimonio Bill y Melinda Gates –recordemos, dueño de Microsoft y segunda fortuna planetaria según la revista Forbes- dedica parte de sus ingresos y de sus deducciones de impuestos a la fundación, humanista y filantrópica según los estatutos, que lleva su nombre y tiene como objetivo proporcionar a la humanidad “innovaciones en materia de salud”. La dotación de la Fundación estaba estimada en más de 36.000 millones de dólares a finales de 2012, y sus subvenciones anuales superan el presupuesto de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
La página Techno-science.net explica que el preservativo ha cumplido ya 400 años y es de gran eficacia como medio de contracepción y para frenar la propagación d enfermedades de transmisión sexual. Sin embargo, dice, su uso no está generalizado porque hay mucha gente que considera que su utilización reduce el placer. El preservativo ha evolucionado muy poco en los últimos 50 años, la última gran innovación fue la utilización generalizada de látex, en lugar de caucho, en su fabricación.
Por eso, “la fundación Bill y Melinda Gates quiere subvencionar la invención de un nuevo preservativo que tenga las ventajas del actual, pero no sus inconvenientes”.
Enfoques radicalmente distintos
En su comunicado, la fundación hace un elenco de especialistas en disciplinas que podrían investigas el nuevo preservativo: neurociencia, biología vascular, urología, ciencias de los materiales, etc.
