Investigadores de la Universidad Complutense de Madrid, han desarrollado un biosensor químico que es capaz de detectar los procesos de adulteración de carne de ternera con carne de caballo. En los últimos años se está luchando contra el fraude en los productos cárnicos y contra el abuso de las adulteraciones de carne no apta para el consumo humano ya que es una cuestión de salud pública . El biosensor electroquímico es capaz de reconocer un fragmento de ADN prácticamente invariable en los más de 4.500 genomas mitocondriales de caballo secuenciados y ausente en el resto de las especies de mamíferos.
Así, es posible la identificación selectiva y sin falsos positivos de cualquier tipo de carne de caballo, independientemente de su raza”, apunta F. Javier Gallego, investigador del departamento de Genética de la UCM.
Estos métodos “no suelen ser suficientemente selectivos como para diferenciar especies animales cercanas debido a la posibilidad de reacciones cruzadas, ni suficientemente fiables en productos procesados debido a la desnaturalización y degradación de las biomoléculas (proteínas y ADN nuclear) que se producen por estos tratamientos térmicos”, justifica Susana Campuzano, investigadora del departamento de Química Analítica de la UCM y coautora del estudio publicado en Analytical Chemistry.
El resultado de este biosensor es fruto de la colaboración entre las facultades de Ciencias Químicas y Ciencias Biológicas de la UCM y de los doctorandos, Víctor Ruíz Valdepeñas y María Luisa Gutiérrez. Además de trasladarse a la identificación de otros ADNs de mamíferos, podría aplicarse tanto para la detección de adulteraciones que involucren otro tipo de carne animal como con fines de cribado para identificar todas las especies animales presentes en una carne.