Greenpeace ha emitido un comunicado en el que valora que los dos países que más CO2 emiten en el mundo, China y Estados Unidos, se hayan adherido formalmente al Acuerdo de París, porque supone un gran paso para su entrada en vigor y el comienzo de lo que debe ser una actuación internacional mucho más ambiciosa frente al cambio climático.
Greenpeace reclama en la COP21 de París un acuerdo firme sobre energías renovables para 2050“El mundo tiene finalmente un acuerdo climático mundial con EE.UU. y China como partes formales, lo que marca una nueva era en los esfuerzos mundiales de combatir el cambio climático. Ambos países tienen ahora que escalar y acelerar sus esfuerzos para trazar un futuro que evite los peores impactos del cambio climático”, ha declarado Jennifer Morgan, directora ejecutiva de Greenpeace Internacional.
“España no se puede quedar atrás y debe ratificar con urgencia el acuerdo. No hay que esperar a la formación de un nuevo gobierno para que el actual en funciones lleve al Congreso la propuesta de ratificar París”, ha declarado José Luis García Ortega, responsable del área de Cambio Climático y Energía de Greenpeace España. “Solo ratificando el acuerdo en el Congreso quedará España comprometida a cumplirlo, y las declaraciones que se hicieron en París se verán confirmadas con los hechos”.
“El anuncio conjunto de los presidentes, Xi y Obama, manda una fuerte señal al mundo de que París se ha movido del acuerdo a la acción”, ha declarado Li Shuo, asesor senior sobre política climática de Greenpeace. “El compromiso de hoy hace mucho más real la posibilidad de que el Acuerdo de París entre en vigor, pero este momento debe ser el punto de comienzo, no el final, de la acción global sobre el cambio climático”.
La declaración también concluye una serie de acuerdos bilaterales sobre temas climáticos entre Pekín y Washington bajo la supervisión de Obama, que Greenpeace considera que deberían reforzarse en los próximos años.
“El acuerdo de París es un hito para las negociaciones mundiales sobre el clima, pero no es la meta final”, ha declarado Kyle Ash, representante legal senior de Greenpeace EE.UU. “Estados Unidos y China deberían ahora defender internacionalmente que París entre en vigor lo antes posible, de forma que el mundo pueda seguir avanzando.”
La cumbre del G20 ofrece ahora la oportunidad de comprobar si los otros 18 líderes económicos muestran su compromiso con París.
El Acuerdo de París entrará en vigor una vez 55 países, que sumen al menos un 55 % de las emisiones mundiales, hayan depositado sus instrumentos de ratificación. China y EE.UU. suman un 38% de las emisiones mundiales. La ratificación es la confirmación legal y por escrito de que un país se compromete con un tratado internacional, condición para que esté obligado legalmente a cumplirlo.