Aunque pueda parecer extraño el 57 % de la población mundial no tiene acceso a la red. Hoy, 17 de mayo se celebra el día de Internet. Ese lugar en donde todo sucede, todo se comparte, todo existe, todo se encuentra, todo se cuelga, todo se baja, todo está, porque «si no estás en Internet, no existes…», recuérdalo.
Según el informe sobre el ‘Estado de la banda ancha’ de la Comisión de la Banda Ancha para el Desarrollo Digital de la UIT y la UNESCO desvela que 3.200 millones de personas están conectadas, con respecto a 2.900 millones el año pasado, lo que equivale a 43% de la población mundial.
Ahora bien, mientras que el acceso a Internet está casi saturado en los países desarrollados, la Red sólo está al alcance de 35% de los habitantes de los países en desarrollo. Los objetivos definidos por la Comisión de la Banda Ancha de las Naciones Unidas para 2011 no se han alcanzado en la fecha prevista de 2015 y parece improbable que se alcancen antes de 2020.
A finales de 2015, unos 3200 millones de personas usaban internet lo que equivale a más del 43 % de la población mundial total, en comparación con las 2.900 millones, que lo utilizaban un año antes. Esto es una realidad, en el año 16. Aún, el 57 % de la población mundial no está conectada.
Por otro lado, se valora que el acceso a los hogares de Internet en los países desarrollados supone una saturación, ya que el 81.3 % están conectados todo el día. Muchas familias tienen a todos sus miembros conectados cerca de 6 horas al día, lo que supone que no existe otro tipo de comunicación entre ellos; no se habla, no se expone nada, no se comparte y solamente reina el silencio porque todos están conectados con alguien, o solos. Los hábitos de ocio han cambiado también y se ven series, videos, se escucha música, siempre en soledad. Esto está generando conductas y comportamientos que distan mucho de lo que se solía hacer en un hogar tan solo hace cinco años atrás. Es frecuente que en los países desarrollados las familias dispongan su ocio y tiempo libre y no lo compartan con las otras personas que están en su hogar, ya sean compañeros, amigos, padres, cónyuges, etc.
Esto sumado al incremento de la miopía entre los más jóvenes da que pensar. Al no enfocar a distancias superiores a un metro, los países desarrollados están teniendo un incremento importante de los problemas referidos a la miopía debido a que desde los dos años los niños ya manejan tabletas, ordenadores e incluso móviles. Las personas se conectan nada más levantarse para ver el tiempo, las noticias, sus mensajes, whataspp, algún correo, envían fotos, suben algo a instangram y luego se desayunan. Esto sumado al trayecto que les lleva al trabajo o estudios hace que entre los seres humanos ya no exista el modelo de comunicación habitual, sino que se comparte con otros que no están ahí presentes lo que está generando también ciertos modelos sociales de cambio de hábitos a la hora de relacionarse, emparejarse, etc, etc.
Según cifra la ONU también estima que habrá en total casi 3 500 millones de suscripciones a la banda ancha móvil a finales de 2016. Analistas del sector predicen 6 500 millones de suscripciones a la banda ancha móvil (3G/4G/5G) en 2019, es decir que la banda ancha móvil será el servicio TIC que experimentará el crecimiento más rápido de la historia.
Los países con mayor número de usuarios de Internet en el mundo son Islandia (98,2 %):, Noruega (96,3 %) y Dinamarca (96 %). Los 10 países con mayor penetración de Internet en los hogares están en Asia o en Medio Oriente. La República de Corea tiene la mayor tasa de penetración de banda ancha en los hogares del mundo, con 98,5 % de los hogares conectados; Qatar % por ciento, Arabia Saudita 94 %. En cuanto a la penetración de la banda ancha fija, hay seis naciones (Mónaco, Suiza, Dinamarca, los Países Bajos, Liechtenstein y Francia) en las cuales la penetración de la banda ancha es superior a 40 %o, cuando en 2013 había sólo una, Suiza.
La situación de los 48 países menos adelantados, designados así por Naciones Unidas, resulta particularmente crítica, pues 90 % de sus habitantes no tiene ningún tipo de conectividad a Internet; destacan Guinea (1,7 %), Somalia (1,6 %), Burundi (1,4 %), Timor-Leste (1,1 %) y Eritrea (1 %), el país con menos acceso a Internet.