Se llama músculo aductor al ‘que tiene como función mover una parte del cuerpo acercándola a su eje’, mientras que se llama músculo abductor al ‘que tiene como función mover una parte del cuerpo alejándola de su eje’, de acuerdo con las definiciones del diccionario Clave. En las noticias sobre lesiones deportivas es habitual confundir ambas palabras: «Coentrão no jugará más en el Mundial por una lesión en el aductor», «El lateral portugués sufre una lesión de grado dos en el abductor derecho», «Francia sufrió ayer otra baja: el centrocampista Clement Grenier, con un desgarro en el aductor derecho» o «Grenier sufrió este jueves una lesión en un abductor durante un entrenamiento».
Tal como indica el Diccionario panhispánico de dudas, «aductor (‘que aduce’ y ‘[músculo] que realiza los movimientos de aducción’) no debe confundirse con abductor».
Así pues, más allá del parte médico oficial en estos casos concretos, es necesario asegurarse siempre de cuál es el músculo afectado y, en función de ello, escribir aductor o abductor.