Activistas de Extinction Rebellion entregaron en el Congreso de los Diputados este 9 de septiembre de 2019 una declaración de rebeldía no violenta contra la emergencia climática, respaldada por mil firmas, y escenificaban con la instalación de un patíbulo sobre bloques de hielo que el riesgo de extinción masiva de especies es un riesgo para la humanidad sobre el que gobiernos e instituciones vienen mintiendo desde hace treinta años.
En la parte más llamativa de la iniciativa frente al Congreso, dos activistas de pie sobre unos bloques de hielo en un patíbulo improvisado, se han puesto la soga al cuello “para escenificar la situación crítica en la que nos encontramos. Se nos acaba el tiempo, si el calentamiento global continúa, la supervivencia de la especie humana está en peligro”.
Desde la organización de Extinction Rebellion en España recuerdan que las Naciones Unidas y el mundo científico llevan más de treinta años alertando de la gravedad de la situación ecológica, y que en 2018, científicos del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC) y la Plataforma Intergubernamental de Biodiversidad y Servicios Ecosistémicos (IPBES) de la ONU presentaron sendos informes alertando sobre la actual pérdida de especies y el riesgo severo de extinciones masivas, demostrando que el peligro de un cambio climático descontrolado y abrupto era también una gran amenaza para la humanidad.
Ante esta amenaza de extinción, la comunidad científica instó a una transición «rápida, profunda y sin precedentes» en todos los ámbitos: industria, agricultura, energía, transportes, ciudades.
Y la falta de respuestas adecuadas motivó la aparición de Extinction Rebellion, movimiento que surgió en Reino Unido, impulsado por By2020WeRiseUp, y que se ha ido extendiendo por numerosos países, conformando una red coordinada internacionalmente.
Demandas de Extinction Rebellion:
- Los gobiernos deben decir la verdad sobre el clima, promover una emergencia ecológica más amplia y revertir las políticas inconsistentes.
- Los gobiernos deben promulgar medidas de política legalmente vinculantes para reducir las emisiones de carbono a cero neto para 2025 y reducir los niveles de consumo.
- Se deben constituir Asambleas Ciudadanas para supervisar los cambios, como parte de la creación de una democracia adecuada para el propósito.
En España se está desarrollando una iniciativa en favor de una Alianza por la Emergencia Climática, que exige a los Ayuntamientos una declaración de Emergencia Climática y asumir compromisos sobre las medidas que se deben adoptar y elaborar una hoja de ruta vinculante.
En la declaración de Emergencia Climática se debe reconocer que el planeta, así como los seres vivos y los ecosistemas, se encuentran en grave peligro, siendo prueba de ello los informes sobre el estado de la biodiversidad y sobre el calentamiento global de 1,5 º C del IPCC, que alertan de un rumbo que lleva a la extinción de una gran parte de los ecosistemas terrestres y de que un millón de especies están amenazadas por la actividad humana.
Para Extinction Rebellion «la situación es de tal gravedad que la propia existencia de las sociedades humanas al verse críticamente dañados los ecosistemas de los que dependen, queda en entredicho.
Indican que en consecuencia la ciudadanía debe de entender la urgencia e irreversibilidad de esta lucha y los ayuntamientos deben desempeñar un papel clave en la formación, educación e información sobre el necesario freno a las emisiones y la adaptación a las consecuencias del incremento de la temperatura global.
Y se insta a los gobiernos municipales a que en su ámbito de actuación abandonen los combustibles fósiles, apostando por una energía renovable de manera urgente y prioritaria con planes de actuación para frenar nuevas infraestructuras fósiles, alcanzar el autoconsumo eléctrico con energías renovables y promover una movilidad sostenible, creando espacios peatonales, fomentar la bicicleta y otros medios de transporte no contaminantes, reducir la demanda de energía hasta consumos sostenibles, promover el aumento de la eficiencia energética y de las instalaciones renovables, crear espacios educativos y la información a la población sobre la emergencia climática, alcanzar una política de residuo cero.
Se insta también a los equipos municipales a apoyar la gestión de los comunidades locales enfocada a la recuperación de la tierra fértil y el freno de la erosión, la recuperación de los acuíferos, la recuperación de los pastos a través de la gestión inteligente del territorio, determinar apoyos y beneficios fiscales para la españa vaciada que desarrolla funciones claves de mitigación del cambio climático y abordar proyectos de regeneración rural, ecológica y humana.
Y, reconociendo el nivel de degradación ya alcanzado, iniciar la necesaria adaptación de los municipios a la crisis climática provocada por el incremento de la temperatura global, las olas de calor, la irregularidad de las precipitaciones, el aumento del nivel del mar y otras manifestaciones que ya se están produciendo.
Concluyen que la justicia, la democracia y la transparencia deben ser pilares fundamentales de todas las medidas que se apliquen, y hay que establecer un mecanismo de toma de decisiones ciudadano de carácter vinculante con competencias en materia de vigilancia, seguimiento y control de las medidas adoptadas. Para ello será necesario establecer indicadores y objetivos verificables y cuantificables.
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