Activistas detenidos permanecen en celdas heladas, con cámaras de vigilancia 24 horas y sin suficiente acceso a agua potable
Greenpeace ha revelado hoy en Moscú su intención de presentar una querella criminal ante el departamento de policía de Murskman (Rusia) por la incautación ilegal de su barco el MY Arctic Sunrise.
«Se cometieron graves violaciones cuando la FSB (Servicio Federal de Seguridad Ruso, antes KGB) detuvo a la tripulación y al rompehielos Arctic Sunrise», ha asegurado Alexander Mukhortov, el abogado que representa al capitán del Arctic Sunrise, el estadounidense Peter Willcox: «Un grupo de hombres armados y enmascarados sin identificar abordaron el buque mientras apuntaban a la tripulación con pistolas. Luego tomaron el control de la nave, confiscaron los objetos personales y pusieron a toda la tripulación bajo custodia, sin mostrar ninguna documentación que acreditara estas acciones».
Además, la organización ecologista ha señalado que presentará quejas por la violación de los derechos de los 30 detenidos.
«En algunas celdas hace mucho frío y hay cámaras de vídeo grabando todo el día. No todos los detenidos tienen suficiente acceso a agua potable», ha explicado Sergei Golubok, abogado de Greenpeace Internacional.
Los abogados de Greenpeace también han objetado la forma en que se transportó a los activistas en furgones policiales. Algunos de los detenidos han sido trasladados durante 4-5 horas por trayecto a las audiencias de la corte en Murmansk en cajas metálicas sin comida, calefacción o acceso a un baño.
En otro orden de cosas, Greenpeace Internacional confirma que las audiencias de apelación contra los 28 activistas, un cámara y un fotógrafo independientes acusados de piratería, se iniciará el martes.
Las audiencias de los tres activistas rusos, tendrán lugar a partir de las 9:30 horas, hora local. Greenpeace Internacional ha sido informado que las 27 audiencias restantes, se llevarán a cabo entre el miércoles y el sábado de esta semana.
Un vídeo del interrogatorio del capitán Peter Willcox por parte del Comité de Investigación dentro del Arctic Sunrise el viernes 28 de septiembre, se ha hecho público.
En la conferencia de prensa de hoy, Greenpeace ha presentado datos preocupantes sobre la forma en que se mantiene al Arctic Sunrise. El ingeniero jefe del barco, Mannes Ubels, fue autorizado el viernes pasado a visitar el buque en un puerto militar en las afueras de Murmansk, donde la Agencia Federal rusa FSB lo mantiene anclado. Tras la visita, Ubels dirigió una carta a la FSB, mostrando su preocupación por el mantenimiento de la nave:
«Pronto, si no lo ha hecho ya, el generador que produce la electricidad del barco, dejará de funcionar. Esto llevará a que todas las funciones principales del buque dejarán de funcionar, como también el sistema secundario. La nave ya no tendrá un sistema de alarma y cualquier fuga, como el agua del mar entrando en la sala de máquinas, ya no hará sonar las alarmas», escribía Ubels en una carta al jefe de la Comisión de Investigación. «Respetuosamente, les pido que valoren la posibilidad de dejar que me encargue del barco para evitar graves problemas y, en el peor de los casos, su hundimiento».
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