Cada una de las veinticuatro partes imaginarias en que se divide la superficie terrestre y en las que rige la misma hora, señala Fundéu, es un huso horario, escrito con h, no uso horario.
La confusión se debe a la creencia de que se trata del sustantivo uso, y por eso muchas veces se encuentra la expresión uso horario, cuando en realidad el término adecuado es huso que proviene del latín fusus, como recoge el Diccionario académico.
No resulta difícil encontrar en los medios de comunicación frases como «El Congreso se plantea utilizar el uso horario británico en España para facilitar la conciliación» o «Los actuales anfitriones tienen la peculiaridad de ser los primeros en desarrollar el torneo con diferente uso horario», en las que lo adecuado habría sido escribir huso horario.
Es como demasiado en realidad la duda-HORROR en el uso comunicativo de redacción en los medios, del término o concepto huso horario, porque en el cuarto año básico me enseñaron lo que es y modo de escribirlo.
En fin, pero también he visto a personas cultas (un senador en Chile, por ejemplo) que han señalado «estar de acuerdo con las opiniones de los señores Ortega y Gasset», o a colegas (periodistas) preguntarme ¿Quién es Hemingway? Y a más de una personalidad le he escuchado que al filósofo griego antiguo que más ha leído es a Sócrates (¿¿??).
Mi nombre de pila (por lo bautismal) es Abel. Debería ser bien conocido porque está en la Biblia (Génesis) y nada menos que en hechos bien protagónicos. Sin embargo, con bastante frecuencia cuando me lo solicitan en oficinas u otros sitios, me preguntan: «¿se escribe con H? (No es que se trate de personas conocedoras del hebreo o que saben de la transliteración del nombre).