Los filósofos griegos consideraban que el hombre debía permanentemente tomar decisiones en su vida, y esta actitud marcaba el buen rumbo o la crisis. Los buenos gobernantes tienen esa espada de Damócles sobre sus cabezas: decidir.
Decidir, a veces, ante etapas cruciales, y esa decisión no solo afecta su vida sino la de todos sus conciudadanos. Ėse fue el dilema de un hombre que se enfrentó a momentos decisivos en su país, Ecuador: Jamil Mahuad.
Jamil Mahuad nació en Loja, una provincia cercana a Perú, se graduó de Doctor en Jurisprudencia de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador, y tiene una Maestría en Administración Pública de la Escuela de Gobierno John F. Kennedy de la Universidad de Harvard, donde actualmente es profesor. Desempeñó varios cargos como diputado (1990-1992), Ministro de Trabajo, y alcalde de Quito (1992-1998). Su gestión como alcalde fue muy exitosa y esa labor avaló su candidatura presidencial.
En 1998, asume como presidente de Ecuador y una de sus primeras acciones fue la firma del Acuerdo de Paz con el Perú, asumiendo personalmente las negociaciones. Este acuerdo finalizó con años de conflicto y tensiones, estableció hitos definitivos de frontera y dio estabilidad y prosperidad a la región.
Durante su mandato, sin embargo, el país empeora su crisis económica, problema que venía arrastrando de gobiernos anteriores y que se aceleró dadas las circunstancias exteriores. Ante la devaluación acelerada, el mandatario se vio en una situación de emergencia y decretó la dolarización y un cierre bancario que perjudicó a miles de ecuatorianos. Este hecho provocó su derrocamiento.
La presidencia del Mahuad fue corta, solo dos años, como un huracán selló la ansiada paz con Perú, creó el Bono Solidario y declaró zona intangible la zona del parque Yasuni y de la Reserva de Cuyabeno, recibiendo el Premio Regalo a la Tierra del Fondo Mundial para la Naturaleza en 1999, y ese mismo año declaró la dolarización de Ecuador, logrando una estabilidad que se vive hasta hoy, pero a un costo muy alto para el pueblo y donde el mismo presidente quedó soportando juicios políticos y el exilio forzoso. Fueron momentos decisivos y fundamentales para Ecuador, que incidieron en la región y en la propia vida del presidente.
La historia de esta situación límite es abordada en el libro «Así dolarizamos al Ecuador». A veintiún años de los hechos, Mahuad expone en su libro las razones, el análisis por parte de su gobierno y la definición del hecho, en medio de un clima de urgencia y enfrentado la crisis económica más aguda que había vivido el Ecuador.
El autor considera al libro «Memorias de un acierto histórico en América Latina», algo que reafirman especialistas y otros presidentes coetáneos que vivieron el fenómeno y comentaron el libro: Fernando Henrique Cardoso de Brasil y Eduardo Frei de Chile. No fue ese el parecer de una población empobrecida que debió luchar para recuperarse y que generó la emigración masiva de ecuatorianos a España, Italia y Estados Unidos.
Es un libro histórico político, testimonial, por lo tanto sujeto a controversia, ampliamente documentado, y marcado por las declaraciones de su protagonista. Un libro de consulta fundamental para el entendimiento de los procesos históricos contemporáneos de los países latinoamericanos, por el análisis meticulosos de los acontecimientos, por la visión de primera mano de los hechos, evidenciando la problemática de las decisiones urgentes a la que son expuestos los presidentes ante momentos de crisis.
Gobernar es un arte, por eso, el libro es también una reflexión sobre el gobierno, las prioridades y la perspectiva del futuro, especialmente en una América Latina tan propensa a la improvisación y a la falta de planificación. El autor muestra el esfuerzo de compenetración y análisis que tuvo su gobierno y sus colaboradores en la búsqueda de la mejor solución al conflicto.
La segunda parte del libro incluye textos de los integrantes del equipo de Gobierno, y especialistas internacionales, como el economista argentino Domingo Cavalho, quienes encaran el tema de la implementación de la dolarización en el país. Según los indicadores macroeconómicos actuales, el tiempo, parece haberle dado la razón al presidente y a su equipo.
La dolarización estableció un antes y un después en la historia de Ecuador, estabilizando la economía del país. María Belén Puente, economista ecuatoriana, considera que «se sacrificó a mucha gente pero en la perspectiva histórica, nos benefició».
Desde el punto de vista latinoamericano, le dio un nuevo giro al tema de la dolarización, como alternativa factible, que no se adviene, sin embargo, a todos los casos, ni países, de allí la necesidad de estudio y evaluación antes de su implementación.
Argentina trato de hacer la conversión sin el éxito de Ecuador, El Salvador hace veinte años que maneja el dólar y el colon, y Venezuela, aunque sea paradójico, recientemente ha implementado la dolarización.
«Así dolarizamos al Ecuador» es un libro para especialistas en el tema, economistas y administradores públicos, es además un libro de estudio para la gestión de gobierno, e imprescindible para los historiadores y los interesados en los procesos políticos y económicos de la región. Es una reflexión profunda sobre los hechos, causas, efectos y decisiones que determinan nuestro devenir latinoamericano, relatado por uno de los protagonistas relevantes de esa historia.
El libro publicado por la editorial Ariel, del grupo Planeta, se presentará en Madrid, en la Universidad Camilo José Cela, con la presencia del Jamil Mahuad, autoridades universitarias y un panel de expertos académicos en el tema, el 23 de junio a las 18:00 horas en el Campus Almagro, Escuela de Postgrado, de dicha Universidad.
