Dos recientes exposiciones en Barcelona y Madrid sobre la obra de Andy Warhol (1928-1987) son motivo para que Higinio Polo haga un detenido análisis de quien, habiendo sido un chico pobre de Pittsburgh, llegó a ser icono de la contracultura y uno de los patrones del pop art.
En el artículo publicado en el número de junio de El Viejo Topo, Polo apunta en las primeras líneas que esas dos exposiciones (Warhol, el arte mecánico) ponen en evidencia lo que desde hace tiempo debería haber sido constatado: se trata de una obra mediocre, a menudo artísticamente insuficiente, construida sobre el glamour de una cultura extinta, aunque formidablemente retribuida. Según el articulista, los críticos dotaron a Warhol de una fantasiosa aura de misterio y de una sofisticación que estaba lejos de poseer. Temeroso siempre de arruinarse, convirtió la fama en una profesión, e inició el camino que “después recorrieron artistas de ocasión, buscavidas y pícaros de la modernidad, y que culmina al día de hoy en el vulgar exhibicionismo y en la putrefacción de una cultura de masas que, de la mano de la televisión, busca el conformismo, la abulia y bel embrutecimiento popular.
De las dos entrevistas que publica en su número 365 la revista, es muy interesante la que López Arnal hace a Mark Aguirre, autor del libro El nacimiento de una especie. Un viaje a África en busca del origen de la vida humana. Se trata de un viaje interior a ese continente, escrito en un lenguaje no científico, en el que se discuten problemas decisivos de nuestra historia evolutiva. El autor no cree que el simbolismo sea un producto del mito y la religión sino a la inversa. El libro está estructurado en tres rupturas y ofrece una aproximación física a yacimientos muy importantes en la historia de la paleontología, de indudable interés para aquellos investigadores que no hayan podido hacerlo en vivo.
La otra entrevista es la que también López Arnal hace al profesor de Sociología Andrés Piqueras a propósito de su libro La tragedia de nuestro tiempo: la destrucción de la sociedad y la naturaleza por el capital. Análisis de la fase actual del capitalismo. Entiende Piqueras que se vote lo que se vote, hay que obedecer los dictados que vienen de fuera, en una época, además, en que la posibilidad mayor es que se desaten procesos catastróficos para la humanidad. La deuda y el capital ficticio mantienen la apariencia de que el sistema sigue funcionando.
Un artículo de Manolo Monereo abre la publicación de este mes, Dilemas estratégicos de la defensa de España, al que sigue otro, firmando por Armando Fernández Steinko, que lleva por titular Inventemos un nuevo país de países. El autor estima que ha llegado el momento de romper con el discurso de los “derechos” o “nacionalidades” históricas cuyo fundamento tiene una raíz esencialmente lingüística, y que hoy es utilizado para asentar privilegios de unos ciudadanos frente a otros. La propuesta federal de un nuevo país de países tiene que dotarse, entre otros principios, de una cultura plurilingüe en todo el territorio y de una cultura democrática avanzada.
El peligro de intensificación y extensión de la guerra en Siria aumenta, a juicio de Eduardo Luque y Bashar Barzai, autores del artículo Camino hacia el abismo. El bombardeo del pasado 14 de abril en Siria por parte de Estados Unidos, Francia y Gran Bretaña, con la excusa de destruir una supuestas factorías de armas químicas que a la postre se ha demostrado que no existían, la ruptura del tratado nuclear de EE. UU con Irán y los misiles lanzados por Israel horas más tarde asobre también supuestas bases iraníes, hace más factible ese peligro. Por primera vez en la historia, Estados Unidos y Rusia se han amenazado con la guerra total.
