Luis de Luis[1]
Magui Mira ha aceptado un reto aún más difícil de los que parece. Adaptar todo un clásico moderno lo es. De una forma u otra, el público tiene en su inconsciente la legendaria película homónima y, en especial, sus carismáticos protagonistas que, por una u otra razón, ya son, de pleno derecho y parafraseando al clásico, “material del que están hechas las leyendas”.
Todo lo anterior no solo no ha supuesto un condicionante sino que, tengo para mí, que ha servido de acicate y reto a Mira para contar la historia. La historia de una madre y una hija y su amor filial – tan firme, como enternecedor, como “regañado” – a través del tiempo y los otros amores, más o menos pasajeros, más o menos intensos, más o menos estables que se cruzan y (entre) cruzan.
Magui Mira cuenta la obra con toda la elegante sabiduría escénica que ha demostrado una y otra vez y combina pasados y presentes, acciones y reacciones, dimes y diretes en un preciso damero donde transcurren las danzas de cuatro actores a los que sabe sacar lo mejor de sí: la volcánica y temperamental Lolita Flores como Aurora, un desmesurado y contenido Luis Mottola como el vanidoso Garret, una sensible y alegre Marta Guerras como la joven hija y un ajustado Antonio Hortelano.
Así “La fuerza del cariño” se convierte en una deliciosa comedia, un tapiz de emociones, de llamadas y respuestas, de idas y venidas; en una partida, en definitiva, en la juegan reinas y sotas de corazones.
- Luis de Luis es crítico teatral
Ficha artística
REPARTO
Lolita Flores
Luis Mottola
Antonio Hortelano
Marta Guerras
Versión y dirección: Magüi Mira
Iluminación: José Manuel Guerra
Diseño de escenografía: Curt Allen Wilmer con estudiodeDos
Productor: Jesús Cimarro
Una producción de Pentación Espectáculos
