El Gobierno de México ha informado de que, junto a los gobiernos de Uruguay y de los países de la Comunidad del Caribe (CARICOM), se propone el Mecanismo de Montevideo para contribuir a que el pueblo venezolano y los actores involucrados puedan encontrar una solución a sus diferencias.
El Gobierno de México explica que esta iniciativa responde a la llamada del secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, para abordar la compleja situación que prevalece en Venezuela mediante el diálogo para la negociación, desde una perspectiva de respeto al derecho internacional y a los derechos humanos.
El Mecanismo de Montevideo pone a disposición de los actores venezolanos una alternativa pacífica y democrática que privilegia el diálogo y la paz, para fomentar las condiciones necesarias para una solución integral, comprehensiva y duradera; mediante una diplomacia activa, propositiva y conciliadora para acercar a las partes en disputa, respetando los principios de no intervención, la igualdad jurídica de los Estados, la solución pacífica de controversias, el respeto a los derechos humanos, y la autodeterminación de los pueblos.
Con base en la experiencia de los países firmantes en procesos de mediación y solución pacífica de conflictos, el Mecanismo de Montevideo propone un proceso que se desarrollará en cuatro fases, durante un periodo razonable y previamente acordado por las partes:
- Diálogo Inmediato: Generación de condiciones para el contacto directo entre los actores involucrados, al amparo de un ambiente de seguridad.
- Negociación: Presentación estratégica de los resultados de la fase de diálogo a las contrapartes, buscando puntos en común y áreas de oportunidad para la flexibilización de posiciones e identificación de acuerdos potenciales.
- Compromisos: Construcción y suscripción de acuerdos a partir de los resultados de la fase de negociación, con características y temporalidad previamente establecidas.
- Implementación: Materialización de los compromisos asumidos en la fase previa, con el acompañamiento internacional.
Los países que suscriben esta propuesta coinciden en que el grado de complejidad de las circunstancias no es razón para desestimar las vías diplomáticas de solución de controversias y que este mecanismo ayudará al restablecimiento de la tranquilidad del pueblo venezolano por la vía del diálogo y la paz, para reducir las tensiones entre las fuerzas políticas y evitar la amenaza o el uso de la fuerza.
En caso de que las partes decidan comunicarse, invitarían a Rebeca Grynspan, exvicepresidenta de la República de Costa Rica y actual secretaria general Iberoamericana, así como a los excancilleres de Uruguay y México, Enrique Iglesias y Bernardo Sepúlveda; y a David Simons, expresidente del Tribunal Supremo de Barbados, como alto representante de CARICOM, como personalidades de reconocida experiencia internacional y calidad moral, para acompañar este mecanismo
