Yuri Korchagin, embajador de Rusia en España, asegura que si otro país se ofreciera para acoger al estadounidense Edward Snowden, «con mucho gusto lo dejamos ir», informa Carmen Chamorro.
En una intervención en el Foro España Internacional, dedicada al próximo vigésimo Aniversario de la Constitución de Rusia, Korchagin recordó que Snowden llegó “inesperadamente” a Rusia, donde se le ofreció refugio temporal, con la condición de que no perjudicara los intereses de Estados Unidos.
El embajador recordó que su país no ha salido del escenario internacional y por eso, la posición consecutiva y firme de Rusia en relación al conflicto Sirio, -donde se insistió que el arreglo debía venir del diálogo entre oposición y gobierno-, pone en evidencia que es necesario eliminar la amenaza de las armas químicas del régimen sin apoyar a la oposición, ya que empeora la situación.
Esta postura ha sido reconocida y apoyada por la mayoría de los estados, lo que demuestra una vez más que Rusia tenía razón desde un principio, dijo. “La guerra civil, de la que somos testigos, trae sufrimiento, elevado número de víctimas y una gran catástrofe humanitaria”. Asimismo, subrayó que lo que hace falta es unir e incluir a la oposición, para que dicho proceso sea “un hito, espero que exitoso, en el arreglo de la situación».
En su conferencia, donde expuso la visión amplia del desarrollo de la democracia de Rusia, recalcó la irreversibilidad de la elección histórica de los ciudadanos del país en 1991. El Embajador prestó especial atención a las relaciones entre Rusia y la Unión Europea y marcó las prioridades principales en la colaboración entre España y Rusia.
Queriendo dar más explicaciones sobre la postura de Rusia en política exterior, Yuri Korchagin matizó que el gobierno ruso condena la violencia y las violaciones del derecho humanitario internacional tanto si procede de la parte del gobierno sirio u oposición armada. La parte significativa de responsabilidad por el derramamiento de sangre es de los que incentivan a los adversarios del gobierno, a que se niegan a acordar el alto de fuego y entablar el diálogo, exigiendo la capitulación incondicional del régimen.
Igualmente dijo que los intentos de buscar vías de solución fuera del Consejo de Seguridad de la ONU pueden llevar a consecuencias más destructivas, si cabe, para Oriente Próximo.
Se refirió asimismo a que Rusia espera que «nuestros socios asuman la lógica de realización práctica del principio de la seguridad compartida en el sistema antimisiles”.
Para Rusia, es de primordial importancia obtener garantías sólidas que este sistema no está orientado en contra de las fuerzas rusas de contención nuclear. Tales garantías han de confirmar la coincidencia de los fines de este sistema y los objetivos declarados de los promotores. Es decir, defensa de las amenazas de los misiles de fuera de la región euroatlántica y Rusia.
En el acto estuvieron presentes empresarios españoles, representantes del Ministerio de Asuntos Exteriores de España y de otros organismos de Estado, miembros del cuerpo diplomático acreditados en Madrid, periodistas, y diplomáticos de la Embajada de Rusia.
Juan Miguel Villar Mir, presidente de OHL, anunció que los trabajos desarrollados en Rusia en los últimos meses han permitido ser los adjudicatarios del ferrocarril Ural-polar con un presupuesto 1.900 millones de euros.
Indudable, ahora ya no es problema dejarlo ir, porque de seguro Rusia ya directa o indirectamente respecto a lo que sabe Snowden y su documentación, lo tiene todo, como dijo Pedro el Grande, según recuerdo, «una vez estrujada la naranja se bota la cáscara». Y eso de quedarse en Rusia siempre que no perjudicara a los EE.UU., es más bien frase de relaciones públicas y buena crianza, que válida para lo de información secreta clasificada. «A otro perro con ese hueso».
En las relaciones entre Estados, no hay amistad verdadera, predominan los intereses de Estado.