En la sección oficial de la 67 edición del Festival de Cine de San Sebastián celebrada en 2019 dos películas se reparten los premios gordos, otorgados por el jurado internacional que presidía el director irlandés Neil Jordan.
En primer lugar la brasileña “Pacificado”, del estadounidense Paxton Winters, que cosecha además los premios de mejor actor para Bukassa Kabengele, y de mejor fotografía a cargo de Laura Merians. Esta es la segunda película de Paxton Winters, después de “Crude” en 2003.
Con esmerada factura de producción y cuidada fotografía, Winters filma con indudable oficio en las favelas de Río la historia de un traficante de drogas y antiguo jefe mafioso que regresa a casa al salir de la cárcel, donde permaneció catorce años, y su relación protectora con una adolescente que cree ser su hija.
Con claves de cine de acción y de guerra por el poder en las favelas, muestra como el viejo capointenta escapar a la espiral de la violencia, en el momento en que el gobierno brasileño lanzaba una operación de “Pacificación” o toma de control militar de las favelas.
He tenido ocasión de ver “Pacificado” y lo cierto es que no me había entusiasmado, pues a mi juicio carece de verdadera emoción en el desarrollo de sus personajes principales: el viejo mafioso, la adolescente y su madre prostituta y drogadicta. En cuanto a su tratamiento cinematográfico me parece poco original. Sobre la violencia en las favelas, hemos visto en el pasado mejores películas brasileñas, como por ejemplo “Ciudad de Dios” de Fernando Meirelles, o “Abril despedazado” de Walter Salles.
Concha de plata 2019
En segundo lugar “La trinchera infinita” se lleva la concha de plata al mejor director para el trío vasco Aitor Arregui, Jon Garaño y José Mari Goenaga. Esta es su tercera película después de “Loreak” y “Handia”. Se trata de una película vasca pero rodada esta vez en castellano y situada en Andalucía, que cuenta con dos excelentes intérpretes: Juan Antonio de la Torre y Belén Cuesta. El tema central es aquí el miedo de “un hombre oculto” durante la guerra civil en España, escondido durante 33 años en un zulo para escapar a los crímenes franquistas, guion escrito por Luis Berdejo y José Mari Goenaga, que ha merecido también el premio especial del jurado.
La concha de plata a la mejor actriz se la han repartido ex equo Greta Fernández por su papel en “La hija de un ladrón” opera prima de Belén Funes, que ha sido una de las mejores sorpresas de esta competición. Una emocionante crónica social sobre una joven madre soltera en la España de hoy. El premio es compartido con la actriz alemana Nina Hoss por “La audición”, de la directora alemana Ina Weisse, la historia una profesora de violín obsesionada por el talento de uno de sus alumnos.
Un premio especial del jurado ha sido otorgado a “Proxima” de la directora francesa Alice Winocour, quien firma aquí su tercer largometraje de ficción. La historia de una astronauta que vive con su hija de siete años y se siente culpable de no poder ocuparse de ella cuando la eligen para una misión espacial que debe durar todo un año.
El premio de la sección ‘Nuevos realizadores’ ha sido para la brillante película chilena “Algunas bestias”, segunda película de Jorge Riquelme, quien cuenta con una pareja de lujo en su reparto: Alfredo Castro y Paulina García. Sin lugar a dudas los dos mejores actores chilenos del momento actual, muy solicitados también por otros directores latinoamericanos.
Rodada en catorce días, con mucha inteligencia en su realización pese a una evidente economía de medios, pone en escena un drama familiar con siete personajes, los padres, los hijos, los abuelos y un empleado de un caserío en una isla chilena. Radiografía de deterioradas relaciones familiares que estallan cuando los hijos solicitan un préstamo a sus padres.
El muy veterano Alfredo Castro nos confió que ha sido para él una de las películas más difíciles de interpretar. Tanto él como Paulina García, están sorprendentes y camaleónicos en ese papel de abuelos burgueses reaccionarios y perversos.
Riquelme filma con maestría el horror que a menudo se esconde en los secretos de familia, institución en la que se apoya la sacrosanta propiedad privada, y que suele estallar en mil pedazos en cuanto sus miembros discuten de dinero o de herencias. Los más bajos instintos del ser humano afloran con los personajes patéticos y manipuladores de esos dos abuelos adinerados que detestan a su yerno, y cuyo comportamiento terminará en incestuoso abuso sexual.
En la sección Horizontes latinos, una mención especial ha sido otorgada a “La bronca” película peruana de los hermanos Daniel y Diego Vega.
El premio Horizontes latinos ha sido en cambio para «De nuevo otra vez», opera prima de la actriz, escritora y dramaturga argentina Romina Paula, con una interesante película experimental mezcla de ficción y de documental autobiográfico sobre el tema de la maternidad y la condición de la mujer.
[…] que los abuelos les presten dinero, a lo que no parecen muy dispuestos. La película consiguió el Premio Nuevos Realizadores en el Festival de San Sebastián […]