Teresa Gurza¹
Tenemos un presidente aplicadísimo que todos los días se supera y, cuando uno cree que sus pendejadas [estupideces] tocaron fondo, resulta que no, que ese día las comete peores.
Esta semana insultó al Parlamento Europeo y a los 27 países que representa, al llamar a sus diputados «injerencistas, borregos, golpistas y reaccionarios», por instarlo a frenar su retórica populista contra la prensa. Con lo que una vez más mostró su ignorancia y nulo roce diplomático.
Hay quién dice que su comportamiento errático tiene el propósito de desviar la atención de los graves problemas nacionales y las diarias masacres.
Pero si así fuera, nos agregaría otro, porque sus pifias internacionales, dejan a México como país de tarados por haberlo elegido presidente. Y tendrían razón, porque lo único que hace bien es levantarse temprano y quejarse.
Es tan narcisista, que piensa que todo lo que acontece es contra él y como está rodeado de serviles que lo alaban al precio que sea, o más bien por el precio que sea, se regodea en lo que provoca.
Característica principal de sus empleados, porque decirles colaboradores sería mucho, es su poca dignidad, y el mejor ejemplo es el canciller Marcelo Ebrard, que acepta. muy calladito, humillaciones y ninguneos.
Como si se tratara de un té de tías al que se envía a alguien de la familia y no de la toma de protesta de un presidente, AMLO mandó a Santiago de Chile a la incongruente historiadora que pregona el amor a los indígenas, pero se tiñe el pelo de dorado.
Y fue también fue ella y no Ebrard, la que llevó a Buenos Aires la carta de López Obrador al mandatario argentino «por los embates conservadores que sufre».
Qué curioso es eso, ¿a qué se deberá que al presidente le encanta enviar cartas?
Pero mientras se pelea con medio mundo y al mismo tiempo se sueña líder de la otra mitad, Estados Unidos alerta sobre la influencia de los cárteles de drogas en nuestras elecciones.
Desde hace años todos lo sabíamos, pero es mucho más grave que la advertencia, a la que puede seguir amenaza porque coloca a México al mismo nivel de peligrosidad que Al Qaeda y el Estado Islámico, venga del vecino.
En su «Evaluación de Amenazas Alrededor del Mundo» de este año, las diecisiete principales agencias de inteligencia gringas destacaron que los cárteles usan millones de dólares para reclutar y armar combatientes capaces de confrontar a las fuerzas de seguridad mexicanas, y que durante el proceso electoral del año pasado asesinaron a 102 políticos, cincuenta menos que en 2018, en la lucha por el control de cargos, rutas y territorios.
Al respecto, el periodista Jorge Menéndez Fernández, en su columna Razones del 10 de marzo pasado en Excelsior, explicó que el narcotráfico es un negocio y, para su buen funcionamiento, requiere de logística y transporte.
Y el Tren Maya y el Canal Interoceánico de López Obrador, «son un sueño que los cárteles no habían imaginado…» y permitirán surtir, con rapidez y bajo costo, a la zona este de la Unión Americana, y tener mayor presencia en Cancún, por donde entran drogas de Colombia, Venezuela y Perú, y mujeres eslavas y sudamericanas para la trata.
Pero crímenes y alertas no preocupan al presidente que, ante las matanzas de cada día a cargo del Cartel Jalisco Nueva Generación, solo sugirió «que se cambie de nombre, para no afectar a Jalisco».
Otra sorprendente noticia de la semana fue el estreno de México como primer país que en el Día Internacional de la Mujer tiene como principal festejado a un hombre, porque la alcaldesa de la Ciudad de México encabezó a 60 mujeres que, en lugar de marchar por sus derechos, gritaron «es un honor estar con López Obrador».
Sin culpas
Lo demás, ha sido lo de siempre: cadena de mentiras y acusaciones porque todo lo malo que nos ocurre es culpa del neoliberalismo y las administraciones anteriores.
Tiene [lleva] más de tres años gobernando, pero nada es su responsabilidad, y las mañaneras son un rosario de quejas de lo que le hacen quienes buscan derrocarlo. Que, según él, ya somos muchos: periodistas, diputados europeos, padres de niños con cáncer y sin acceso a medicamentos, 75 mil mujeres que marcharon el 8 de marzo, la ONU y sus organizaciones, adolescentes violadas, madres que cavan por todo el país buscando cuerpos en fosas clandestinas, ecologistas, desempleados, y hasta los asesinados, porque ha dicho que fueron balaceados para desestabilizarlo.
Pero él, como cordero inocente, se prestará al sacrificio en la tramposa renovación de mandato del mes que entra; que a lo mejor en el fondo de su alma quisiera aprovechar para aventarnos su tiradero [dejarnos su basura] y largarse.
- Teresa Gurza es una periodista mexicana multipremiada que distribuye actualmente sus artículos de forma independiente.
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