A primeras horas de la mañana (hora local) del lunes 9 de octubre de 2017, los guardacostas de Bangladesh han anunciado la muerte de una docena de personas -“diez niños, una señora mayor y un hombre”- y decenas más de desaparecidos, así como la aparición de varios supervivientes, en el naufragio de un barco que huía de Birmania cargado de rohinyás, la minoría musulmana que está siendo objeto de un auténtico genocidio, según la información que publica el diario francés Le Monde.
El naufragio ocurrió en la noche del domingo cerca del pueblo costero de Galachar, en el Golfo de Bengala. Según el comandante Alauddin Nayan, responsable del cuerpo de guardacostas, en la embarcación iban más de cien personas, de las que solamente 40 eran adultos.
“Después varios días de calma- dice la información del diario francés – ha vuelto el éxodo de rohinyás hacia Bangladesh, principalmente a causa de la falta de alimentos en el oeste de Birmania donde, según la ONU, el sufrimiento es inimaginable”.
El pasado día 6 de septiembre, cinco niños murieron ahogados en el naufragio de otro barco que trasladaba refugiados que huían de Birmania hacia Bangladesh. En aquella ocasión, y según la versión de las autoridades, tres o cuatro embarcaciones navegaron por el río Naf, una frontera natural entre ambos países. Los guardacostas aseguran que podría haber más víctimas aunque no se hayan encontrado sus cadáveres.