Expo 2020: Dubai, una candidatura fuerte

Dubai tiene como objetivo convertirse en la capital del mundo, presentando su candidatura para organizar la Exposición Universal de 2020.

El deseo por organizar el evento se ha convertido en un imperativo para exhibir la modernidad y la visión del mundo árabe. Por ello, tal objetivo no está sujeto a la impronta por exaltar las virtudes del desarrollo socioeconómico de los Emiratos Árabes Unidos (EAU), en tanto que la candidatura de Dubai de la Expo 2020 muestra un carácter simbólico.

En primer lugar, se permite exponer los logros en el proceso de desarrollo de la joven nación a lo largo de las cinco décadas que han convertido al país en una de las potencias económicas de la región. De este modo, Dubai ha logrado ser una auténtica ciudad cosmopolita, garantizando el progreso y la convivencia entre las diferentes comunidades, etnias y religiones que la componen. Por tanto, se resaltará un modelo de convivencia para toda la humanidad.

Por otro lado, la candidatura de Dubai y de los EAU es la culminación de la intensa competencia con las ciudades de otras cuatro naciones que aspiran acoger este evento: Izmir (Turquía), Ekaterimburgo (Rusia), Ayutthaya (Tailandia) y Sao Paulo (Brasil). Por el momento, la batalla se encuentra en atraer el mayor apoyo posible para la próxima votación, la cual reunirá a los 163 miembros de la Oficina Internacional de Exposiciones (BIE) en la sede de París. Empero, Dubai cuenta con la ventaja del apoyo que le brinda el mundo árabe, los países africanos hermanados por su relación con el Magreb, así como los lazos que unen a los EAU con gran parte del mundo islámico. Asimismo, Dubai cuenta con ventajas objetivas: la estructura económica y financiera flexible, así como sus infraestructuras vanguardistas y modernas. Estos activos, por tanto, están respondiendo favorablemente al objetivo por solucionar los problemas de transporte, alojamiento y comunicaciones, que adolecen el resto de candidatos.

Estas ventajas estructurales quedan recogidas en los indicadores de los organismos internacionales, los cuales miden el grado de competitividad económica, seguridad, sostenibilidad, infraestructura, bienestar social y desarrollo humano. Por tanto, parece lógico que estos indicadores refuercen la candidatura, en cuanto puede ayudar a transformar la imagen que se tiene comúnmente del mundo árabe.

De este modo, comprendemos el valor simbólico de la celebración de la Expo 2020 en el mundo árabe, a lo largo de los seis meses de duración del evento. Asimismo, posibilitará una nueva dinámica favorable para los sectores económicos nacionales, como para la totalidad de las empresas de la región. Así, pues, la universalidad del evento permitirá la apertura a otras culturas, el fortalecimiento de las relaciones humanas, para, de este modo, propiciar la adopción de un nuevo equilibrio en las relaciones internacionales.

El lema “conectar espíritus, construir futuro”, elegido para la Expo 2020, queda reflejado en el compromiso de los EAU, junto a otras naciones, para construir un futuro mejor a través de una conectividad inteligente y una estrategia de asociación y colaboración. Existen potentes argumentos para materializar este objetivo: Dubai es, de hecho, un puente y enlace entre Oriente y Occidente, Norte-Sur… así como Sur y Sudeste. Su ubicación estratégica en la región del Golfo y el Oriente Medio, sus puertos clasificados entre los más grandes del mundo, y una amplia red de aerolíneas del mundo conectando las capitales de más de 120 países con la región… por todo ello, queda reflejada perfectamente la pertinencia de este tema escogido por la candidatura de Dubai.

La reciente visita de la delegación de la Oficina Internacional de Exposiciones (BIE), la cual duró cuatro días, comprobó in situ el peso real de Dubai para acoger en las mejores condiciones posibles la Expo 2020. La delegación atestiguó la idoneidad del tema “conectar espíritus, construir futuro”, la capacidad de invertir en infraestructuras e instalaciones modernas para albergar la futura sede de la exposición, al mismo tiempo que se reflejaban los beneficios de la imagen internacional del Estado de los EAU, la ambiciosa campaña promocional, el número de visitantes potenciales y las expectativas de uso a largo plazo del recinto de la Expo que se localizará en Dubai Trade Center-Jebel Ali.

En la carrera por alcanzar la meta, Dubai se encuentra en una postura privilegiada, tal como demuestran los rankings mundiales.

En nuestro objeto por comparar el rendimiento, iremos trazando las ventajas de Dubai para acoger el evento a través de una metodología de investigación de excelencia sujeta a los principios de las exposiciones universales (las cuales permiten valorar el intercambio de conocimientos y perfeccionar los métodos) así como los requisitos de la “UAE Vision 2021” y el Plan Estratégico de los Emiratos que procura desarrollar la economía a través de la excelencia, el conocimiento y la innovación. Es de destacar que la candidatura de Dubai beneficia de la excelente posición que ocupa el Estado de los EAU en numerosos informes de organizaciones internacionales en distintos campos.

El Informe sobre la Competitividad Global 2012-2013, establecido por el Foro Económico Mundial, el cual reúne 144 análisis de países sitúa a los EAU en el lugar 24, muy por delante de Tailandia (38º), Turquía (43º), Brasil (48º) y la República de Rusia (67º). Mientras, el Anuario de Competitividad Mundial, el cual compara la competitividad de 59 países, sitúa a los EAU en el puesto 16 (Tailandia: 30, Turquía 38, Brasil: 46, Rusia 48).

El Informe sobre Competitividad de Viajes y Turismo (2011), elaborado por el Foro Económico Mundial, ubica a los EAU en la 30º posición en un ranking de 139 países (Tailandia: 41, Turquía 50, Brasil 52, Rusia 59). Otro estudio realizado por el Foro Económico Mundial, que abarca 132 países, el Informe Global sobre Comercio (2012), señala a los EAU en el puesto 19 (Tailandia: 57, Turquía 62, Brasil 84, Rusia: 112).

Por su parte, el Doing Business (2012), informe publicado por el Banco Mundial en temas de comercio internacional de 185 países, sitúa a los EAU en quinto lugar, mientras que los competidores deben de conformarse con puesto más bajo (Tailandia: 20, Turquía 78 , Brasil: 123, Rusia: 162). Del mismo modo, la calidad de las infraestructuras, los EAU se colocan sextos en el Informe Global de Competitividad 2012-2013 del Foro Económico Mundial (Turquía: 34, Tailandia 49, Rusia 101, Brasil 107).

Resulta que el alto nivel de seguridad y el bajo nivel de corrupción en los EAU (Informe de Transparencia Internacional), han contribuido a la creación de un ambiente diversificado, estable y competitivo que promueva un real desarrollo de los negocios en un contexto de solidaridad social. Esto se refleja claramente en el reciente Informe Mundial sobre la felicidad (Universidad de Columbia – Instituto de la Tierra): los Emiratos son el 17º país con mayor grado de felicidad (Brasil: 25, Tailandia 52, Rusia 76, Turquía 78). También ha reforzado su posición en el informe del PNUD (2013), en tanto en cuanto el Índice de Desarrollo Humano sitúa a los EAU en el puesto 17 entre los 187 países (Rusia: 66, Brasil 84, Turquía 92, Tailandia: 103).

Los índices de Prosperidad Legatum (2013) examinaron los niveles de ingresos, delincuencia y confianza en las instituciones públicas. Estos índices colocan a los EAU en el puesto 29, por delante de Brasil (44º), Tailandia (56º), Rusia (66º) y Turquía (89º).

Los primeros lugares en los campos de desarrollo económico, humano y calidad de vida, recogidos en los rankings elaborados por organizaciones internacionales independientes, representan los activos que distinguen a los EAU de los demás Estados pretendientes en la carrera por la organización de la Expo 2020. De este modo, la reputación que confieren el crecimiento económico, el comercio, el turismo internacional, la conectividad, el bienestar social y la organización de eventos internacionales de gran tamaño, serán claves para la candidatura de Dubái.