Dos libros recogen la historia de la fotografía, los nombres, las tendencias y los movimientos que se han desarrollado en España desde 1839.
Algunos investigadores de la historia de la fotografía afirman que el español José Ramos Zapetti habría descubierto en 1837, dos años antes de la divulgación del daguerrotipo, una forma de reproducir imágenes. Sin embargo, la no constancia de documentación en ningún registro invalida la posibilidad de que este español fuese el pionero de la invención de la fotografía. Es esta una de las anécdotas más repetidas en todas las historias de la fotografía en España desde que en los primeros años del siglo XX algunos autores comenzaran a preocuparse por historiar un arte que había comenzado a ocupar un lugar relevante en la sociedad española, como lo estaba haciendo en toda Europa.
La fotografía registró en España una expansión rápida e imparable. El retrato ocupó a decenas de fotógrafos en una nueva profesión surgida al calor del nuevo invento. Retratistas como Juliá, Martínez Sánchez, Godínez, Antonio Cosmes, Antonio Esplugas, Manuel Company… operaban diariamente en los estudios fotográficos que proliferaron durante el último tercio del siglo XX, iniciando una actividad que desde entonces y durante muchos años no hizo más que crecer.
Algo más que una historia
Desde que en 2005 Publio López Mondéjar publicara su magna “Historia de la fotografía en España. Fotografía y sociedad. Desde sus orígenes hasta el siglo XXI” (Lunwerg), nadie había abarcado el proceso histórico de nuestra fotografía con la amplitud y el rigor con que lo hace Carmelo Vega, profesor de Historia del Arte en la Universidad de La Laguna, en su reciente libro “Fotografía en España (1839-2015). Historia, tendencias y estética” publicado por la editorial Cátedra. Han pasado trece años desde la publicación del libro de López Mondéjar y la historia de la fotografía en España estaba necesitando una revisión y una puesta al día porque en estos años han aparecido nuevos profesionales y se han producido importantes acontecimientos que han situado a la fotografía española en la vanguardia internacional tanto en el fotoperiodismo como en la fotografía social y artística.
El libro de Carmelo Vega dedica el capítulo inicial a indagar en las diversas historias de la fotografía que se han publicado en España, desde las primeras de Lee Fontanella y de Marie-Loup Sougez de 1981 hasta la citada de López Mondéjar. Se trata de un manual que acoge en sus más de 900 páginas la trayectoria de la fotografía en España con una metodología que supone, como novedad, una nueva aproximación a la historia del arte fotográfico en España no sólo con la finalidad de investigar acerca del devenir histórico sino también de desvelar su sentido y su significado. Se dedica especial atención a autores y a hechos poco conocidos así como a fotógrafos no españoles que desarrollaron su profesión en nuestro país, sobre todo en los primeros años de la historia de la fotografía, y a la imagen que de España divulgaron por todo el mundo.
Esta historia de la fotografía en España no se detiene en los grandes nombres ni en aquellos aspectos más conocidos y divulgados sino que, sin dejarlos de lado, pretende estudiar a fondo las grandes tendencias estéticas de la fotografía en España, así como los movimientos que se producían fuera de nuestras fronteras y que sirvieron de referencia a los autores que trabajaban la fotografía en nuestro país. Como novedad, este libro aporta la reproducción de artículos publicados en revistas especializadas a lo largo de los años que abarca esta historia de la fotografía.
En “Fotografía en España. Historia, tendencias, estética”, se estudia además el papel, en la sociedad de cada momento, del comercio y la publicidad, de las modas, de los avances tecnológicos en la fotografía o aplicados a la fotografía, su utilización en campos como la medicina y la investigación policíaca, y el papel que desarrolló en la opinión pública desde la aparición de las revistas ilustradas, junto a una aproximación a los nuevos modelos de creación y difusión de la fotografía en España. A destacar los capítulos finales, dedicados uno de ellos a las mujeres fotógrafas, tan ignoradas en otras historias y manuales, y otro a la crítica especializada, lo que es de agradecer.
50 fotografías con historia
Otro libro publicado recientemente recoge una historia peculiar de los últimos ochenta años de fotografía en España a través de 50 instantáneas que dejaron una huella importante en el imaginario colectivo. El fotógrafo José María Díaz-Maroto y el investigador Félix Fuentes han coordinado los contenidos de “50 Fotografías con historia” (Signo Editores), un libro en el que el protagonismo se centra en la mirada del fotógrafo y en el contexto histórico y social en el que fueron tomadas las imágenes.
En las páginas de “50 fotografías con historia” se han reunido trabajos de autores heterogéneos cuya obra ha divulgado imágenes de guerras, eventos culturales, tragedias, personajes de la historia contemporánea, acontecimientos de todo tipo que han ocupado la información de los medios de comunicación durante el último siglo. Aquí se han reunido algunos nombres señeros del fotoperiodismo español (Enrique Meneses, Gervasio Sánchez, Chema Conesa, Marisa Flórez…) y el compromiso (Sofía Moro, Xurxo Lobato) junto a grandes retratistas (Alberto Schommer, Pierre Gonnord) y a representantes de la vanguardia experimental (Cristina de Middel, Joan Fontcuberta).
También el paisajismo cuenta con fotografías de Sergio Belinchón, Eduardo Nave o Javier Vallhonrat. La fotografía experimental de Chema Madoz y Ouka Lele se mezcla con obras del arte fotográfico de autores como Pablo Pérez-Mínguez y Jorge Rueda.
Hay también fotografías que ya son historia, como las de Francesc Català-Roca y Agustí Centelles. Estas 50 fotografías conforman un periodo histórico de un país que registró los cambios experimentados durante una república, una guerra civil, una dictadura y una transición política hasta llegar al actual régimen democrático.
En los textos que acompañan a las fotografías se explican las condiciones y el momento en que fueron tomadas cada una de estas cincuenta imágenes y el proceso de selección que los autores han llevado a cabo para descartar las tomas alternativas a cada foto. Para ello se ofrecen hojas de contacto y fotografías adicionales que contextualizan cada imagen. Se cuentan también anécdotas relacionadas con los autores de algunas de las fotografías que se incluyen.
