El Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) de España ha acordado permitir la reapertura de la Central Nuclear de Garoña (Burgos) a pesar de que la empresa propietaria Nuclenor, formada por Iberdrola y Endesa, no ha procedido a garantizar su seguridad mediante unas obras y actuaciones previas que se recomendaron cuando la instalación cumplió los 40 años de vida activa previstos.
Según el CSN, aunque Garoña lleva cinco años sin funcionar, podría ampliar su ciclo productivo otros 15 años si implementa ahora las obras marcadas.
Greenpeace, que ha hecho público un informe desaconsejando la reapertura de la central, ya informó en noviembre de 2015 de que el CSN estaba preparando un informe condicionado para ampliar la licencia de la central nuclear de Garoña hasta 2031, para que el Ministerio de Industria pudiera dar la autorización a Nuclenor, y que esta compañí pudiera reclamar pérdidas por “lucro cesante” en caso de que el gobierno decidiera finalmentedesmantelar la vieja planta atómica.
Este 8 de febrero de 2017, tras la reunión mantenida por el pleno del CSN, que aprobó por cuatro votos a favor y uno en contra el informe condicionado para la reapertura de la central nuclear de Garoña, Greenpeace ha acusado al pleno del CSN de malas prácticas en materia de seguridad nuclear por saltarse sus protocolos, e ignorar sus requerimientos, al emitir un informe que no garantiza la seguridad nuclear.
“Garoña no puede cargar combustible ni producir electricidad, sin embargo el CSN se atreve a dar un informe favorable, aun teniendo sobradas razones para no hacerlo, porque Nuclenor no ha hecho su parte y porque en el Congreso de los Diputados así se lo han pedido. Sin embargo no ha dudado en menoscabar la seguridad nuclear en España e ignorar al Parlamento para favorecer los intereses de la industria nuclear”, ha declarado Raquel Montón, responsable de la Campaña Nuclear de Greenpeace.
“Si el ministro de Energía juega limpio no puede utilizar este informe y ampliar la vida de las nucleares por la puerta de atrás, sin participación democrática y usando como tapadera a Garoña. Álvaro Nadal sabe que el Parlamento y toda la ciudadanía debe participar en este debate”, ha concluido Montón.
EQUO considera inadmisible la decisión del CSN sobre Garoña
Greenpeace pide el cierre de la central nuclear de Garoña“Si el Gobierno sigue adelante con la reapertura, propondremos a los grupos una ley que cierre definitivamente Garoña” ha declarado Juantxo López de Uralde, coportavoz de EQUO y miembro de la ponencia nuclear en el Congreso por Unidos Podemos.
“Es inadmisible que, pese a que queda acreditado que Garoña no cumple las condiciones, se apruebe su reapertura” ha declarado López de Uralde: «Garoña es una central obsoleta y peligrosa, pero la industria nuclear la está utilizando de ariete para abrir la puerta al alargamiento de la vida de las nucleares. El hecho de que la central no haya procedido a las modificaciones de diseño requeridas es motivo suficiente para que el dictamen fuera negativo, pero una vez más el CSN acomoda la legalidad a los intereses de las nucleares».
El ministro de Energía, Álvaro Nadal, ha declarado que antes de cualquier reapertura consultoría con las regiones, empresas y grupos ecologistas, pero desde Unidos Podemos le han recordado que hay una amplia mayoría parlamentaria que está a favor del cierre definitivo de esta vieja central obsoleta, y que llevarán a cabo las iniciativas parlamentarias necesarias para que así sea.
«La mayoría parlamentaria se ha mostrado una y otra vez contraria a la reapertura de Garoña, y el Gobierno la está desoyendo. Ahora esa mayoría debe ponerse en acción para evitar la reapertura utilizando todas las vías a su alcance, por eso, sI el Ministerio de industria decide seguir adelante con este disparate, vamos a proponer al resto de los grupos una ley que cierre definitivamente Garoña» ha concluido López de Uralde.
Facua ve escandaloso que el CSN dé luz verde a reabrir Garoña
Facua, Consumidores en Acción ve escandaloso que el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) se vaya a saltar los requisitos que ellos mismos habían exigido para la central de Garoña y que ahora autoricen o den luz verde a su reapertura.
La asociación considera que la supuesta independencia del organismo queda ahora en entredicho: «lamentablemente, todo apunta a que el Gobierno va a proceder a saltarse la voz del Congreso, donde mayoritariamente los grupos de la oposición rechazan la reapertura de las nucleares», valora Facua.
La asociación advierte de que éste va a ser el punto de partida para la reapertura de otras centrales mucho más importantes, como puede ocurrir de forma inmediata con la de Almaraz.
Facua se opone a la reapertura de las centrales nucleares en España, forma de producción energética que no es segura ni para las personas ni para el medioambiente y que por lo tanto debe dejar de utilizarse en el sistema eléctrico español: «El Gobierno debe apostar por formas de generación más baratas y sobre todo más seguras y menos perjudiciales para el medioambiente».
Los propietarios de la central, solicitaron la renovación en 2014 al Ministerio de Energía, a pesar de que Garoña lleva parada desde 2012. La decisión tomada ahora por el CSN ha salido adelante con cuatro votos a favor y uno en contra, el de la consejera Cristina Narbona, quien fue ministra de Medio Ambiente durante el primer Gobierno de Rodríguez Zapatero.
