La publicación ‘Tel Quel’ y otros medios marroquíes han hecho público un documento desclasificado por la CIA donde refleja que el entonces monarca alauí, Hassan II, tenía previsto atacar militarmente el Sahara antes de la retirada de las tropas españolas.
“Tenemos información sobre un posible ataque marroquí en el Sahara, y quiero que sepan que hemos instado al rey de Marruecos a negociar y no hacer nada imprudente”, señala un escrito enviado un mes antes del inicio de la Marcha Verde, producida en noviembre de 1975, por el entonces secretario de estado, Henry Kissinger (“el mayor criminal de guerra que anda suelto por el mundo” como le definió Gore Vidal), al entonces ministro de Asuntos Exteriores español, Pedro Cortina.
El documento de la CIA señala la respuesta española a favor de la mediación americana pero con la “condición de mantener un referéndum de autodeterminación y dar satisfacción a las partes”. El ministro franquista apuntaba que la solución no implicaba la independencia aunque es una de las opciones para dar credibilidad y que en la opción del referéndum deberán optar sus preferencias por Marruecos o Mauritania.
En este intercambio la diplomacia española criticó a Estados Unidos por armar a Marruecos a lo que contestó Kissinger que apenas le dieron armas por valor de 20 millones de dólares. Cortina también señaló que Hassan II “estaba muy nervioso, trató de convencerme de no informar a las Naciones Unidas de nuestros planes de descolonización”.
Anteriormente, otro medio marroquí publicó un reportaje titulado ‘Cuando Carter dudó en apoyar a Hassan II en el Sahara’ basado en cables desclasificados de 1977 a 1980 sobre el norte de África que alberga datos del Sahara, publicados por la oficina de Estados Unidos. Desde 1976 y hasta 1980 fue presidente el demócrata Jimmy Carter.
Se menciona que entonces se propuso una autonomía rechazada por Marruecos así como un protectorado junto con Mauritania en 1978 pero no se avanzó en este tema para parar la guerra, los cables reflejan que el conflicto no era una prioridad para Estados Unidos.
Un informe refleja que la partición del Sahara entre Marruecos y Mauritania “fue algo arbitrario dividiendo lealtades tribales”. Hay que recordar que Mauritania se retiró del Sáhara en 1979 siendo ocupado el territorio que gestionaba según los Acuerdos de Madrid, por Marruecos.
Hassan II exigía que no se decidiera nada ya que no quería “un estado hostil” y confesaba que dejar el Sahara “sería su fin como rey”, en ningún caso se planteó hacer un referéndum. También se menciona que el Sahara afectaba a la estabilidad de relaciones con Madrid, “ya que el pueblo español está a favor de la autodeterminación”.
Juan Carlos I: “Hassan II es obstinado y terco”
En esos momentos, Hassan II estaba cada vez más aislado internacionalmente. En ese contexto el entonces rey Juan Carlos I mantuvo una conversación con Carter donde al abordar este tema, el monarca español calificó su relación con el rey marroquí como “muy difícil, no te puedes imaginar, es obstinado, testarudo y terco, se queja que España no apoya a Marruecos en el Sahara, le dije que sabe muy bien lo que se espera de Marruecos, no quiere cambiar su posición”.
También interviene, según se refleja, la propia reina Sofía que pregunta a Carter por el papel del general Ahmed Dlimi –jefe militar en el Sahara-, y si cree que irá contra el rey, (recordemos que Hassan II sufrió dos atentados en 1971 y 1972 por parte de militares). “No espero” respondió el presidente estadounidense, quien tuvo que enfrentarse a protestas internas por la situación de los derechos humanos en Marruecos al tener que pedir más armamento para la guerra en el Sahara, “contra las armas sofisticadas del Frente Polisario”.
Hay que recordar que el general Dlimi, uno de los autores de la idea del muro en el Sahara, murió en un extraño accidente de tráfico en 1983 justo tras departir con el rey Hassan II.
Por último, recomendar el documentado trabajo sobre el periodo de la antigua colonia española y su abandono, escrito por el periodista español Tomás Bárbulo, ‘La historia prohibida del Sáhara español’ reeditado recientemente por la editorial Península en marzo de este año 2017. Por cierto, tiene un amable guiño ajedrecístico en el capítulo inicial titulado ‘Jaque de dama a rey’.