La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) ha condenado el asesinato en Brasil del periodista Leonardo Pinheiro y las amenazas en México contra el periódico Reforma, actos que desestabilizan el libre flujo informativo y requieren investigaciones profundas y urgentes.
Pinheiro, propietario de la página de Facebook A Voz Araruamense y colaborador de la página Fala Araruama, fue asesinado el 13 de mayo de 2020 mientras hacía una entrevista en el barrio Parati, municipio de Araruama, en Río de Janeiro. Desde un automóvil un sujeto se le acercó, le ordenó arrodillarse y le disparó. El periodista de 39 años, quien era un líder comunitario y candidato a concejal, daba cobertura a temas que afectaban a la localidad.
El presidente de la SIP, Christopher Barnes, director de The Gleaner Company (Media) Limited, Kingston, Jamaica, condenó el asesinato de Pinheiro y se solidarizó con sus familiares y colegas: «Urgimos al gobierno a investigar de manera profunda y resolver este atroz crimen para llevar ante la justicia a los asesinos y enviar el mensaje de que todo acto de violencia será castigado con severidad».
El presidente de la Comisión de Libertad de Prensa e Información de la SIP, Roberto Rock, director del portal de noticias La Silla Rota, Ciudad de México, México, subrayó que «estos actos de violencia, además de quebrantar el derecho de las víctimas a difundir información, generan temor y autocensura, por ello es de suma importancia la búsqueda de justicia».
Barnes y Rock condenaron también la amenaza recibida en el diario mexicano Reforma, en aparente represalia por críticas a la gestión del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Reforma difundió el audio de una llamada del 13 de mayo de 2020 a sus oficinas de un hombre que se identificó como integrante del Cártel de Sinaloa y amenazó con «volar» el edificio «si no corrige» sus críticas y difamación contra el presidente porque el diario «ya sobrepasó la línea». La amenaza ocurrió luego de la publicación de un video en el que se cuestionan declaraciones del presidente sobre la COVID-19.
Si bien el presidente López Obrador se deslindó de la amenaza en contra del diario y descalificó cualquier acto violento, los directivos de la SIP se refirieron a sus «recurrentes alusiones de que los medios son corruptos, voceros del régimen anterior y mentirosos, especialmente los que critican las acciones de su gobierno».
«Lamentablemente –agregaron- la estigmatización tiene el grave efecto de incitar a seguidores a insultar y amenazar a periodistas y críticos, lo cual frecuentemente desencadena violencia física».
