En lo que parece ser el primer acto de la salida, o expulsión de Polonia de la Unión Europea (UE), el tribunal constitucional, la más alta jurisdicción del país, ha sentenciado este 7 de octubre de 2021 que algunos artículos del tratado de la UE son «incompatibles» con su Constitución.
El tribunal polaco insta a las instituciones europeas a no «salirse del terreno de sus competencias» interfiriendo en el sistema judicial polaco.
«Preocupada» por la decisión del tribunal polaco, la Comisión europea «utilizará todas las herramientas disponibles» para proteger la «primacía del derecho europeo sobre la normativa de los diferentes países», que es «una de las bases de la Unión», según declaración del comisario de Justicia europeo, Didier Reynders.
La UE y Polonia mantienen desde hace meses un notorio desacuerdo sobre las reformas judiciales efectuadas por el muy conservador gobierno del partido Derecho y Justicia, en el poder.
En las instituciones europeas piensan que esas reformas amenazan la democracia y el estado de derecho en Polonia, por lo que el pasado mes de septiembre la Comisión pidió al Tribunal de justicia de la UE que impongan multas diarias a Polonia, en tanto no suspenda dichas reformas.
La UE critica especialmente la amenaza que pesa sobre la independencia del poder judicial en Polonia a partir del nuevo código disciplinario de los jueces y magistrados, así como el sistema para nombrarlos y la posibilidad de trasladarlos entre diferentes tribunales o instancias judiciales.