Según un estudio realizado por el equipo internacional de investigación de la Universidad del País Vasco (UPV/EHU), y de la universidad de Leeds (Reino Unido), la relación existente entre los diferentes patrones dietéticos comunes y el riesgo de desarrollar un cáncer colorrectal aumenta cuando se toma regularmente carne roja, sobre todo en mujeres.
La investigación publicada en el International Journal of Cancer, compara el efecto que tiene la dieta, que incluye carnes rojas, aves, pescado frente a las dietas vegetarianas; en el desarrollo de cáncer en secciones específicas del colon. La comparación de las personas que han tomado carne roja con regularidad, en comparación con las personas que evitan la carne roja en la dieta, es muy grande. En la sección descendente del colon, en donde se almacenan las heces, las mujeres son más propensas a desarrollar este tipo de cáncer conocido como distal.
El impacto de los diferentes tipos de carne roja y de los patrones dietéticos en la ubicación del cáncer es uno de los mayores desafíos en el estudio de la dieta y el cáncer colorrectal. Nuestra investigación es uno de los pocos estudios que analizan esta relación y, si bien se necesitan análisis adicionales en un estudio más amplio, podría proporcionar información valiosa para aquellas personas que tienen antecedentes familiares de cáncer colorrectal y quienes trabajan en el ámbito de la prevención y la salud pública», señala Rada Fernández de Jáuregui, autor principal de este trabajo.
El cáncer colorrectal es el más frecuente cáncer de intestino en todo el mundo. Para el año 2030 se esperan al menos 2,2 millones de nuevos casos de este tipo de cáncer. Actualmente se está estudiando dónde se desarrolla este cáncer y se ha explorado que según el patrón dietético, el desarrollo del mismo en las subsecciones del colon, tiene relación con la ingesta de carne y de si se es hombre o mujer; algo que hasta ahora no se había reparado.
Esta investigación ha arrojado luz sobre cómo el consumo de carne puede afectar de una manera diferente a las secciones del colon y recto y pone de manifiesto la importancia de la dieta en personas con antecedentes familiares de cáncer colorrectal.