En Kiev, la capital de Ucrania, muchos de los manifestantes que en los últimos días han estado en algún momento en la zona de los enfrentamientos con la policía, han recibido un SMS en su teléfono móvil avisándoles que están fichados por participar en las revueltas, según información del blog Big Browser del diario le Monde, que recoge el digital Rue 89.
El texto del mensaje dice: “Querido amigo, está usted fichado como participante en un motín”. Para el diario británico The Guardian, este SMS “parece otro intento más de las autoridades para sofocar las manifestaciones”. Al parecer, también lo han recibido los periodistas que se encontraban en los alrededores, cubriendo las manifestaciones y, según el New York Times, “algunas abuelas de la zona que se encontraban durmiendo la siesta”.
Tanto el ministro del Interior ucraniano como los operadores de telefonía han negado cualquier implicación en el envío de los mensajes. Según la información de Rue 89, tanto si es cosa del gobierno como si ha sido obra de piratas informáticos, el equipo utilizado para hacer el envío masivo ha sido el mismo, y responde al nombre de IMSI cátcher. Se trata de unos aparatos del tamaño de una maleta que desvían la señal de los teléfonos que se encuentran en una zona determinada.
Los servicios de policía e inteligencia lo utilizan habitualmente justamente para hacerse con los números de los teléfonos móviles de los participantes en concentraciones de todo tipo (violentas y no): “Los datos de todos los teléfonos presentes en el radio de acción de la máquina son “aspirados” por ésta. Después, es muy sencillo enviar un mensaje colectivo”.
El mensaje, traducido al inglés, ha sido ampliamente difundido en las redes sociales y comparado con la novela 1984, De George Orwell, y su famoso “Big Brother is watching you”, símbolo de los regímenes autoritarios y totalitarios. Según blog del diario estadounidense New York Times, ninguno de los receptores del mensaje dudó ni por un momento en atribuirlo a las autoridades ucranianas, que intentan «acabar con una rebelión surgida de la suspensión de relaciones entre la Unión Europea y la antigua república soviética, y su posicionamiento cercano a Rusia». Aunque esta es la versión mayoritaria de la prensa occidental, para explicar la escalada en la protesta que dirige la oposición ucraniana, otro punto de vista, esgrimido por algunos analistas políticos en los canales internacionales de televisión, asegura que los indignados ucranianos no quieren tanto formar parte de la UE como no pertenecer al imperio de Putin.
El New York Times recuerda también que no es ésta la primera vez que las autoridades de algún país utilizan este método de hacer llegar textos intrusivos, de forma colectiva: en los últimos días de las revueltas contra el régimen de Hosni Mubarak, en Egipto, los clientes de Vodafone Egipto recibieron un SMS pidiendo “a los hombres honestos y leales que se enfrenten a los traidores y criminales, y protejan al pueblo y el honor”. Obsérvese que, por tratarse de egipcios, el mensaje iba solo dirigido a los “hombres”.