La expresión fondo buitre, con la que se hace referencia al ‘fondo de capital riesgo que invierte en una entidad o en deuda pública de un país cercanos a la quiebra’, no necesita comillas al estar ya extendida en los medios de comunicación, señala la Fundéu.
Resulta habitual en las noticias económicas encontrar frases como «Los tenedores de los “fondos buitre” acusan a Argentina de no estar negociando» o «El ministro de Economía argentino, Axel Kicillof, pidió el apoyo internacional contra los “fondos buitre”», donde habría sido recomendable prescindir de las comillas.
Se recuerda asimismo que el plural mayoritario en el uso es fondos buitre, que se ajusta a las normas de la Nueva gramática de la lengua española sobre las estructuras en aposición.
Por otra parte, con frecuencia se está empleando como sinónimo de esta expresión el término inglés holdout (creditor), como en «El Gobierno argentino aceptó hoy reunirse con los holdouts en Nueva York».
Aunque son conceptos cercanos y en ocasiones pueden llegar a ser equivalentes, fondo buitre es la traducción de vulture fund. El término holdout (creditor), en cambio, alude a cualquier acreedor que rechaza participar en un proceso de restructuración de deuda, esto es, a un acreedor inflexible, expresión que habría sido preferible en el ejemplo previo.