La Fundéu señala que la grafía fuerdái, plural fuerdáis, es la recomendada para el término que alude a los hijos de los nuevos ricos chinos.
En los medios de comunicación se está extendiendo el uso de esta voz, como se comprueba en las siguientes frases: «Muchos “fuerdai” estudiaron en el extranjero», «La forma de vida de los “fuerdai”, descendientes de algunos de los magnates más importantes del país, está levantando revuelo en el gigante asiático» o «El presidente Xi Jiping les exigió a los fuerdai autodisciplina y un comportamiento correcto».
Se trata de una adaptación, ya sea como romanización directa de los caracteres chinos, ya sea a partir de la forma pinyin fù’èrdài. Por tanto, lo recomendable es tratarla como voz asimilada, es decir, con la tilde que se corresponde con la pronunciación aguda que los hispanohablantes perciben habitualmente en las voces de origen chino, aunque en realidad puedan tener varios acentos de intensidad: fuerdái.
La transcripción se ajusta plenamente a la grafía del español, por lo que no necesita cursiva, recurso tipográfico que, no obstante, puede emplearse para señalar la novedad del término, al igual que las comillas, si no se dispone de ese tipo de letra.
Por idénticas razones, se recomienda seguir la pauta general de añadir una ese en el plural, tal como establece la Nueva gramática de la lengua española: los fuerdáis.
Así pues, en los ejemplos anteriores habría sido mejor escribir «Muchos fuerdáis estudiaron en el extranjero», «La forma de vida de los fuerdáis, descendientes de algunos de los magnates más importantes del país, está levantando revuelo en el gigante asiático» y «El presidente Xi Jiping les exigió a los fuerdáis autodisciplina y un comportamiento correcto».