Palmarés del 6º Festival de Cine Italiano de Madrid

El 6º Festival de Cine Italiano de Madrid se clausuró este 28 de noviembre de 2013 con la película “La grande belleza (La gran belleza)” de Paolo Sorrentino, precandidata a los Oscar 2014 por Italia.

La-nave_Roland-Sejko Palmarés del 6º Festival de Cine Italiano de Madrid

En los ocho días dedicados en Madrid al cine italiano contemporáneo se ha contado con más de 5.000 espectadores,  y el palmarés incluye a Anija (La Nave) de Roland Sejko y 37°4 S de Adriano Valerio.

El jurado de la sección de Documentales a concurso, compuesto por María Guerra, Alberto Bermejo y Gregorio Belinchón ha fallado por unanimidad el galardón para Anija (La nave) de Roland Sejko, «por ser un retrato de un momento especialmente dramático tratado con sobriedad y respeto a sus protagonistas y desde la perspectiva del presente. Además por la riqueza de sus materiales audiovisuales y por permitir que el espectador saque sus propias conclusiones”.

El jurado de la sección de Cortometrajes a concurso, formado por Carlos Reviriego, Nahikari Ipiña y Miguel Ángel Barroso, ha otorgado el premios a 37°4 S de Adriano Valerio «por su talento, por extraer emoción y verdad a partir de un relato romántico narrado en un tono personal, poco convencional y realizado con escasos medios.»

Mención especial del jurado

Una mención especial del jurado se ha otorgado a La prima legge de Newton de Piero Messina, «por la notable personalidad de un cineasta que ha sido capaz de aunar contenido y forma a través de una historia delicada y hermosa que aborda el amor otoñal en un registro convincente y genuino».

angela-Molina_Astudillo Palmarés del 6º Festival de Cine Italiano de MadridEl 6º Festival de Cine Italiano de Madrid ha contado con la presencia de Ángela Molina, madrina del festival; con el maestro Marco Bellocchio, Premio a Toda Una Carrera; con los directores Daniele Gaglianone (“La mia clase”, Película de Inauguración), Costanza Quatriglio (“Il fiato sospeso”), Matteo Oleotto (“Zoran, il mio nipote scemo”), Matteo Pellegrini (“Italian Movies”); y con el animador Marino Guarnieri (“L’arte della felicità” de Alessandro Rak).

También el público ha podido disfrutar con otros títulos como “Miele” de Valeria Golino, “L’intrepido” de Gianni Amelio, “L’arbitro” de Paolo Zucca, “Che strano chiamarsi Federico” de Ettore Scola, “La Valle dello Jato” de Caterina Monzani y Sergio Vega Borrego, “Space Metropoliz” de Fabrizio Boni y Giorgio de Finis, “Per altri occhi” de Silvio Soldini y Giorgio Garini, “Bertolucci on Bertolucci” de Luca Guadagnino y Walter Fasano, “Secchi” de Edo Natoli, “Ammore” de Paolo Sassanelli, “La legge di Jennifer” de Alessandro Capitani, “La casa di Ester” de Stefano Chiodini y “L’esecuzione” de Enrico Iannaccone.

Dentro de las actividades paralelas, el homenaje del Premio a toda una Carrera para el veterano y prestigioso director de cine, Marco Bellocchio, se ha complementado con la proyección de su opera prima “I pugni in tasca (Las manos en los bolsillos)” y con la célebre “L’ora di religione (La sonrisa de mi madre)”. Y en los encuentros matinales Un Caffè con Illy, celebrados en el Instituto Italiano de Cultura de Madrid, también estuvo Daniele Gaglianone en el coloquio posterior al visionado de “Pietro”.

También se ha rendido homenaje al músico Luciano Berio, en el décimo aniversario de su fallecimiento, mediante el concierto “C’è Musica e Musica”. Y se contó también con la proyección especial del documental “Verdi genio italiano” de Maite Carpio.

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Nunci de León
Doctor en Filología por la Complutense, me licencié en la Universidad de Oviedo, donde profesores como Alarcos, Clavería, Caso o Cachero me marcaron más de lo que entonces pensé. Inolvidables fueron los que antes tuve en el antiguo Instituto Femenino "Juan del Enzina" de León: siempre que cruzo la Plaza de Santo Martino me vuelven los recuerdos. Pero sobre todos ellos está Angelines Herrero, mi maestra de primaria, que se fijó en mí con devoción. Tengo buen oído para los idiomas y para la música, también para la escritura, de ahí que a veces me guíe más por el sonido que por el significado de las palabras. Mi director de tesis fue Álvaro Porto Dapena, a quien debo el sentido del orden que yo pueda tener al estructurar un texto. Escribir me cuesta y me pone en forma, en tanto que leer a los maestros me incita a afilar mi estilo. Me van los clásicos, los románticos y los barrocos. Y de la Edad Media, hasta la Inquisición.

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